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María Zamora

Producers on the Move 2013 - España

- María Zamora es la directora de la compañía Avalon PC, brazo del sector de la producción del grupo Avalon, activa asimisma en la distribución

María Zamora es la directora, en calidad de productora ejecutiva, de la compañía Avalon PC, brazo del sector de la producción del grupo Avalon, activa asimisma en la distribución. Como compañía, posee un sistema de trabajo bastante inusual en los tiempos que corren, donde impera la necesidad de obtener éxito a corto plazo, ya que cultiva talentos en el cortometraje para luego dar el saltos juntos al largo, como en el caso de David Planell (La vergüenza, 2009), Beatriz Sanchís (Todos están muertos, en fase de postproducción) o Natalia Mateo (con quien está desarrollando su ópera prima). Su última producción ha sido el documental Mapa, de León Siminiani.

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Cineuropa: ¿Cuál fase de la producción de una película te resulta más gratificante?
María Zamora: Personalmente dedico mucho tiempo al desarrollo de los proyectos. No solo la considero una fase fundamental para poder hacer una buena película, sino que además la disfruto muchísimo. Es la fase de mayor intercambio con el guionista y el director. Es dónde uno como productor entiende bien la película que el director quiere hacer y juntos le dan forma.

He trabajado casi siempre con directores noveles a quienes había producido sus cortos, por lo que el intercambio en la fase de desarrollo siempre ha sido muy fluido.

¿Cómo definirías la línea editorial de Avalon PC?
Tratamos de hacer las películas que nos gustaría ver como espectadores, fundamentalmente historias de personajes. Y siempre apostando por directores con una mirada propia.

¿Qué ventajas e inconvenientes conlleva una coproducción internacional?
La ventaja a nivel económico es que abre posibilidades de financiación para el proyecto. A nivel creativo, cuando se trata de una coproducción con equipo artístico y técnico de varios países, el proyecto siempre se enriquece. Lo mismo ocurre cuando se trata de una coproducción financiera, gracias a la mirada externa que te da el coproductor de ese otro país que creyó en el proyecto y que pensó que al público de su país le podría interesar.

Los inconvenientes son que a veces ciertas obligaciones implícitas en la coproducción encarecen la película sin llegar a verse reflejado en la pantalla y que generalmente las coproducciones suponen un trabajo añadido, ya que ese intercambio cultural que por una parte enriquece también puede hacer surgir discrepancias de criterio que hay que gestionar.

¿Hay que estar un poco loco para ser productor de cine hoy día en España?
¡Para ser productor o para intentar vivir de algo que tenga que ver con la cultura!

La producción española atraviesa un momento de gran incertidumbre. ¿Cómo ves la situación?
Complicada. Hoy mismo ha anunciado su cierre la distribuidora, productora y exhibidora de cine independiente más grande de España [n.d.r.: Alta Films].
La industria se aferra a un modelo de financiación que no funciona a falta de alternativas claras en un mercado que se tambalea. Esto unido a que por parte del gobierno no hay una apuesta firme en defensa de la cultura en general y del cine en particular, pone a nuestra industria en una situación muy delicada.

¿Qué expectativas tienes de cara al evento Producers on the Move?
Este tipo de encuentros te abren la mente a otras posibilidades de producción y distribución, ya que provocan el intercambio de ideas y formas de hacer cine. Espero conocer a productores de otros países con los que potencialmente poder trabajar en un futuro. 

  

En colaboración con 

(pinche en el logo para acceder a la lista de Producers on the Move 2013)

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