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Fatih Akin • Director

"Descubrí que solo soy buen productor conmigo mismo"

por 

- El cineasta turco-alemán forma parte del jurado del Festival de Cine de Marrakech y habla sobre su nuevo proyecto, The Cut

Fatih Akin • Director

La trilogía Love, Death and the Devil le ha dado muchas alegrías al director alemán de origen turco Fatih AkinContra la pared [+lee también:
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 (2004) fue Oso de Oro en Berlín y el guión de Al otro lado [+lee también:
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 (2007) fue premiado en Cannes, pero aún falta un capítulo final que el director ya ha rodado: The Cut. El cineasta habla con Cineuropa sobre este proyecto producido por su propia compañía -Corazón International- protagonizado por Tahar Rahim (Un profeta [+lee también:
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), mientras forma parte del jurado del Festival de Cine de Marrakech.

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Cineuropa: No hay duda de que Tahar Rahim es un excelente actor, pero ¿Como decidió que el tenía que protagonizar la película?
Fatih Akin: Por sus condiciones físicas e interpretativas es perfecto para desarrollar este rol, que es algo complejo. Por un lado Tahar no pronuncia ni una palabra en toda la película y su personaje se parece un poco a Charles Chaplin, pero a la vez es un personaje propio de un western, como los de Sergio Leone.

Este capítulo final culmina su análisis sobre la condición humana centrándose en la maldad que en teoría todos llevamos dentro.
Sí, creo que hay maldad en nosotros desde que nacemos. Lo que me fascinaba era explorar el hecho de que la maldad es un proceso de transición desde la bondad y que también existe el fenómeno inverso. Son conceptos ligados de manera muy íntima. El cuerpo más bello puede albergar un cáncer en su interior, por ejemplo, y una misma persona puede se capaz de actos amables y de los peores crímenes. Siempre he pensado que el género humano se encuentra en en este momento en mitad de su proceso evolutivo. Aún está por decidir si dejaremos de vivir entre fronteras, separados los unos de los otros por religiones y nacionalidades...

¿Por qué decidió parar la trilogía y centrarse en otros proyectos antes de finalizarla?
Estaba algo exhausto de trabajar con material tan serio y decidí rodar Soul Kitchen [+lee también:
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(2008), algo que fuera más ligero, que entretuviera a una audiencia más grande y que se pudiera ver comiendo palomitas. Era algo así como practicar un nuevo deporte. Quería saber si podía mover la cámara de un modo distinto y contar otra historia. Esto muy orgulloso de ella.

Además vuelve a ser su propio productor en esta película.
Es algo que he conseguido luchando mucho por ello. Durante diez años trabajé para otros productores. Ellos no querían a algunos de los actores protagonistas de Contra la pared y Al otro lado. Tuve que pelear por ellos. ¡Querían que prescindiera de personas que luego me hicieron famoso! Para ser tu propio productor tienes que enfrentarte a mucha responsabilidad, burocracia y trabajo no creativo, pero te da libertad. Intenté durante un tiempo producir a jóvenes talentos para darles esa libertad, pero casi me arruino. Descubrí que solo soy buen productor conmigo mismo.

¿Por qué aceptó ser miembro del jurado del Festival de Cine de Marrakech?
La razón fue por el resto de miembros. Martin Scorsese, el presidente del jurado, ha reunido a gente tan talentosa como Paolo Sorrentino o Park Chan-Wook. Además él es mi padre cinematográfico y, si tu padre te llama, tú acudes. He de confesar que no creo en la posibilidad de juzgar el arte. Algunas de las veces que he formado parte de un jurado hemos terminado dando el premio al amigo, conocido, compañero de estudio o al amante de unos de los miembros. Pero estar en Marrakech y ver películas de otros durante una semana me permite oxigenarme antes de empezar a editar The Cut. Siempre he soñado con tener un mes libre antes de entrar en la sala de montaje, para poder tomar distancia con la película rodada. Es algo que no he podido permitirme antes porque, de otro modo, las películas hubieran perdido la oportunidad de entrar en competición en algún festival de cine. 

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