26/07/2017 - Cineuropa tuvo la oportunidad de conocer a Viktoriya Tigipko, presidenta del Festival de Cine Internacional de Odesa, para hablar sobre la última edición del evento

Cineuropa tuvo la oportunidad de conocer Viktoriya Tigipko, presidenta del Festival de Cine Internacional de Odesa (OIFF), para hablar sobre la evolución de la industria de cine ucraniana, la expansión de un joven festival de cine y el rol de la recientemente fundada Academia del Cine Ucraniana en los desafíos sociales actuales. 

Cineuropa: ¿Cuánto ha cambiado la industria del cine ucraniana desde el primer festival de Odesa?
Viktoriya Tigipko: Cuando empezamos en 2010, también comenzaba la recuperación de la industria del cine ucraniana, que estaba en un agujero negro desde 1990, cuando la USSR colapsó. En aquel tiempo no había fondos disponibles y los profesionales del cine ucranianos dependían totalmente del mercado ruso. Como resultado, Ucrania se convirtió en un lugar rentable para rodar cine, pero los talentos y reparto locales tenían un papel secundario o nulo en la industria del cine rusa. En 2010, tuvimos la primera ola de apoyo del Estado al cine. Empezó lentamente, con un par de millones, y a día de hoy tenemos fondos de 20 millones de dólares. El cine ucraniano se puede financiar alrededor del 50-80% por el fondo nacional, incluso las series de televisión reciben un 50% de su financiación del gobierno. Esto es genial ya que crea oportunidades para los profesionales del cine.

Asi que inevitablemente viste un aumento de la participación de producciones ucranianas en tu festival también.
Esto es cierto. En nuestra primera edición, no tuvimos ninguna película para elegir en nuestra Competición Nacional. Empezamos a estimular la industria invitando a profesionales de alrededor del mundo, ya que era importante tener un festival de cine internacional mientras manteniamos nuestro interés en la producción nacional. Hablando teóricamente, hay dos festivales bajo el paraguas del OIFF: un festival internacional que sigue los pasos de festivales más establecidos – con jurado, eventos de la industria, invitados, programas secundarios, galas de estrenos – y un festival nacional. Empezamos mostrando solo el par de cortos que teniamos disponibles entonces, mientras que este año recibimos 265 participaciones de películas ucranianas para la Competición Nacional. Si incluimos las más de 900 peliculas presentadas a la competición internacional, hemos batido un récord, pero todos los años son un récord para nosotros. Somos jóvenes y estamos creciendo, esto es sólo el principio.

¿Cuál es una de las características que hace único al OIFF?
Cada año experimentamos con algo nuevo, pero creo que el screening especial en Potemkin Stairs es un evento único. Tenemos el que quizá es uno de los cines al aire libre más grandes del mundo que puede tener una audiencia de 15000 en un monumento de valor tanto histórico como cinemático. Todo el mundo conoce el lugar gracias al largo de Eisenstein, asi que es importante añadir una nueva dimensión al lugar.  El año que viene se expandirá la audiencia añadiendo una segunda pantalla a la plaza, por encima de las escaleras para que pueda participar más gente.

Parece que estáis atravesando una expansión sin fín.
Cada año encontramos oportunidades para expandir. Siempre tenemos teatros llenos, la audiencia es bastante joven y abierta a ver cine independiente artístico. Ya hemos añadido una nueva localización para visualizar y el año que viene incluiremos otro multiplex, con la esperanza de que se nos unan más cines. Tenemos una media de 120,000 admisiones, y este año ese número puede ser incluso mayor, pero esto se compensará con los nuevos cines. Además, cada día tenemos una visualización gratuita en el Green Theatre, que tiene una capacidad de más de 3000 personas, para que todo el mundo pueda ser parte de la experiencia del festival. Cada visualización va seguida de masterclasses impartidas por nuestros invitados.

Esta expansión también se ve reflejada en vuestra programación, ¿es esto importante para tí?
Sin duda. Comenzamos hace dos años con Documentales Europeos como una sesión de ideas, y entonces se convirtió en un programa y en una competición este año. El año pasado tuvimos una sesión de ideas para series de televisión, la cual hemos convertido este año en un programa especial, y el año que viene se convertirá en una competición. También tenemos un programa especial infantil, que es extremadamente importante para atraer a las familias e introducir nuevos espectadores desde una edad temprana al cine artístico. La educación también es importante, por supuesto.

Con respecto a la educación, recientemente creaste la Academia del Cine Ucraniana. ¿Cómo se relaciona esto con las actividades del OIFF?
El equipo detrás del OIFF tiene una reputación sólida, ya que la industria del cine confía en nosotros. Asi que cuando creamos la Academia del Cine (leer noticia), todo el mundo estaba contento ya que ofreciamos un sistema transparente siguiendo el modelo de los BAFTA. Hay  600 cineastas ucranianos elegibles para unirse a la Academia, y en menos de un año hemos asegurado la membresía de un 50% de ellos. Ofrecemos membresía gratuita, pero a cambio, los miembros deben participar en actividades sociales, educando a más gente sobre el cine a través de lecciones gratuitas, masterclasses y otras iniciativas en universidades, institutos y escuelas. Debemos entrenar a una audiencia mayor y a más profesionales, ya que la educación importa.

(Traducción del inglés por Daniel Doblado)