03/09/2023 - VENECIA 2023: En vez de ofrecernos la teoría del todo del título, el director alemán opta por el misterio

Johannes (Jan Bülow) se dirige a un congreso de física en los Alpes suizos en 1962, donde otro científico tiene previsto revelar una nueva teoría de la mecánica cuántica. Poco después, comienza una investigación, y la femme fatale Karin parece ser la única que conoce los secretos que oculta este extraño lugar. El director alemán Timm Kröger nos da detalles sobre The Universal Theory [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Timm Kröger
ficha de la película], presentada en la competición de Venecia.

Cineuropa: No solo haces referencia a películas clásicas, sino que The Universal Theory parece una.
Timm Kröger: Lo curioso es que en realidad no lo planeamos. Cuando trabajaba con mi director de fotografía, Roland Stuprich, le enseñé algunas películas de Orson Welles, Truffaut y Helmut Käutner. Después de eso, simplemente nos apoyamos en ese recuerdo de lo que solía ser el cine.

Nunca quise que fuera una colección de referencias ingeniosas a lo Tarantino; yo no soy así. Hay elementos irónicos, pero en lo que se refiere al tono, la película es mucho más seria. A veces parece un thriller de Hitchcock, aunque no lo sea. Es más próxima a un noir, aunque nunca la traté como un solo género. He mezclado muchas cosas en la película.

Es interesante ver cómo este hombre, tan consagrado a los números y los hechos, se encuentra con algo que no puede entender. Es una historia sobre lo desconocido, como Picnic at Hanging Rock.
Al guionista Roderick Warich y a mí siempre nos ha gustado el cine metafísico. Todo gira alrededor de esa pregunta incontestable: ¿hay razones divinas detrás de las cosas que nos ocurren, o simplemente vivimos en un universo caótico e indiferente? Ya hemos oído hablar de “la teoría del todo”. Los científicos llevan siglos buscándola. Hemos visto películas sobre genios de las matemáticas, como Una mente maravillosa o El indomable Will Hunting… Quería inspirarme en estas películas y tener un personaje principal que fuese al mismo tiempo un genio y un idiota [risas]. Tienes que formar tu propia opinión sobre él, porque la película nunca lo hace. De hecho, el protagonista pierde la oportunidad de convertirse en un genio. Creo que esta es la historia de muchas biografías humanas. El mundo está lleno de genios que nunca llegaron a triunfar.

Cuando hablamos de esta historia repleta de pistas, es inevitable pensar también en Thomas Mann, especialmente por la ambientación. ¿Por qué la escogiste?
La montaña mágica es el modelo arquetípico de esta historia. Una vez más, tenemos a todos estos intelectuales disfrutando de una buena cena en las montañas suizas. También quería hacer una película sobre los años sesenta, y tenía que ser en blanco y negro. Tenía que ser en las montañas suizas, con físicos alemanes que van a esquiar. Esta idea se me ocurrió en un par de segundos después de rodar mi última película, que trataba sobre la música y el misticismo de la naturaleza alemana. La soñé de esa forma. Sueño de la manera a la que nos ha acostumbrado el cine clásico.

La historia está ambientada en los años 60, por lo que, como se muestra en una escena, todos se apresuran a señalar sus pecados pasados. Todavía podemos oler la guerra.
Mi historia familiar no es muy interesante, pero me gustaba escuchar las historias de mi padre sobre aquella época. Tengo esa conexión con la historia alemana de posguerra, llena de secretos y cosas de las que no se habla. Había muchos fantasmas sobrevolando aquella época. Esta película trata de la historia alemana, aunque no sea la trama principal. Quería que fuera extraña, entretenida y que al mismo tiempo tuviera un aire de pesadilla.

Dijiste que “tenía” que ser en blanco y negro; parece el sueño de cualquier director de fotografía. Con todo, ¿intentaste que pareciera moderna?
Estilísticamente, teníamos que volver a los años 40 y 50, sobre todo en lo que se refiere a la iluminación, y luego hacer que la película pareciera un poco más moderna y adulta. Hay algo especial en la forma en que iluminaban las películas en esa época, una increíble ingenuidad, y supongo que también se puede trasladar a la música. Parece como si necesitara una planificación cuidadosa, pero simplemente nos presentamos en el plató y lo hicimos. El estilo de la película es ostentosamente dramático, pero yo quería que se viniera abajo en algunos momentos.

¿Lo ves como una historia sobre la obsesión? Johannes busca la verdad, pero cuando conoce a Karin, empieza a seguirla a ella.
Sí. Supongo que es bastante anticuado: sustituye la búsqueda de esa misteriosa verdad sobre el universo por la de una mujer que sigue eludiéndolo. Es un ejemplo típico de psicología masculina infantil. Quería incorporar ese concepto y burlarme de él. A veces, me gustaba ver las cosas desde la perspectiva de Karin. Cuando lo haces, ves una película completamente diferente.

(Traducción del inglés)