02/05/2005 - Encarnando la extraña heroina de Los Ojos Claros, actriz fetiche del director Jérôme Bonnell nos comenta el génesis y el rodaje de la película

Encarnando la extraña heroina de Los Ojos Claros, en él que la cámara la sigue prácticamente del primer plano hasta el último, Nathalie Boutefeu, actriz fetiche del director Jérôme Bonnell nos comenta el génesis y el rodaje de la película. Un análisis instantáneo que nos da esta actriz que se ha cruzado en sus diez años de carrera con directores de la talla de Patrice Chéreau (Su hermano), Marc Recha (Pau y su hermano) o Arnaud Desplechin (Reyes y reina).

¿Qué le sedujo en la historia de Los Ojos Claros para que insistiera en que Jérôme Bonnell desarrollase el guión?
El guión correspondía a un cortometraje interesante, pero el tema valía bastante más y merecía de ser desarrollado en un largometraje. El personaje de Fanny en particular era fascinante y original, y complatemente nuevo y inesperado para mí. La historia me interesaba por la transformación de esa mujer a la que no miraban.¿De veras se sabe por qué un personaje seduce? Como en la vida real, sabes cuando quieres, pero no por que. Es exactamente lo que ocurre con un papel: despierta un eco en tí.

¿Cómo te preparaste para expresar la personalidad esquizofrénica de Fanny?
Hemos hablado mucho, Jérôme y yo. Fue él quien elaboró el personaje, lo inventó y intenté recoger el máximo de información sobre Fanny en función de lo que él deseaba. Hemos hablado de la literatura del cuento, en particular de los hermanos Grimm y de Hans El Erizo, hemos visto películas en particular La Mosca de Cronenberg o Alguien voló sobre el nido del cuco y hemos estudiado los cuadros de Munch. Sin embargo, lo que me inspiró más fue el personaje de Mouchette en la novela de Bernanos (Bajo el Sol de Satanás, por su lado salvaje. Todos esos elementos se han sumado, y es lo más importante cuando trabajas en un papel, todo ese imaginario que se pone en marcha y empieza a nutrirse de cosas muy diferentes, incluso de gente a la que he conocido y que viven los mismos estados sicológicos de Fanny. Al mismo tiempo, nada estaba previsto y no sabía muy bien como todo eso iba a salir en el rodaje, auqnue no tenía miedo de jugar la segunda parte sin diálogos. Lo he vivido con mucha simplicidad, porque siempre acabas expresando tus sentimientos, con o sin palabras.

¿Qué tiene de singular Jérôme Bonnell, con él que ya rodaste dos cortos y dos largos?
Jérôme ya ha alcanzado un alto grado de madurez. Se ha vuelto más secreto todavía pero sabe dónde quiere dirigir su mirada. Adora a los actores y procura darles una gran libertad de movimiento e intenta que la cámara acompañe esa libertad. Para Los Ojos Claros, siempre situó su cámara en un pie, por lo tanto tenía las ideas muy claras y de hecho es una película con muy buen cadraje. La libertad, también la encuentras en 20m².