16/11/2007 - Tras OT, la película, REC es el segundo trabajo conjunto del dúo Paco Plaza - Jaume Balagueró

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crítica
tráiler
entrevista: Jaume Balagueró, Paco Plaza
entrevista: Julio Fernández
ficha de la película]?
Jaume Balagueró: Paco Plaza y yo habíamos hablado mucho sobre el género, cuáles son los mecanismos del miedo, lo que funciona y lo que no, lo que nos gusta y lo que no. Y de pronto se nos ocurrió la idea de intentar adaptar el género de terror a la narrativa televisiva del directo: una historia de horror contada en directo y en tiempo real, desde la perspectiva de una sola cámara inmersa en la acción a modo de falso reportaje. Eso permitiría al espectador vivir el miedo de una forma más real y directa, como si formara parte de la película.

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El lema de uno de los trailers de la película reza Experimenta el miedo. ¿Con qué experimentáis el miedo vosotros?
J.B.: A mí me dan miedo cosas muy cotidianas y reales. Una de las cosas que más me aterra es la violencia.
Paco Plaza: A mí también me dan mucho miedo los arrebatos de violencia fuera de contexto. Una pelea en un bar por la mañana, alguien que protesta porque el café está frío y va subiendo de tono. La violencia desmesurada.

¿Os gusta el pasaje del terror de los parques de atracciones y el tren de la bruja de las ferias ambulantes? Ver REC es algo parecido a uno de esos "viajes"...
J.B.: Me fascinaban cuando era pequeño. Pero lo cierto es que hace años que no lo he experimentado. En cualquier caso esa era una de nuestras grandes referencias. Queríamos que la película fuese un poco más allá de lo que estamos acostumbrados en el cine, que se viviese más como una experiencia.
P.P.: Era un poco la idea. Que la película no fuese para un espectador pasivo, sino que participase como un personaje más, que la película se viviera.

Siendo dos directores, ¿cómo repartisteis las funciones en el proceso de producción del film?
P.P.: De ninguna manera. Todo lo hicimos de mutuo acuerdo Balagueró: No nos repartimos las funciones, sino que lo hacíamos y decidíamos todo entre los dos. Si bien eso hubiese sido imposible en una película convencional, REC fue una experiencia totalmente distinta. Aquí se trataba de conducir entre los dos el falso reportaje que la reportera y su cámara estaban llevando a cabo, diseñar la falsa realidad en la que se verían inmersos. Lo cierto es que lo pasamos estupendamente trabajando juntos.

La idea de filmar cámara al hombro no es muy habitual en el cine, ¿no os preocupaba que molestara al espectador, acostumbrado hoy día al brillante cine de estética de videojuego, esta manera de narrar tan cruda?
J.B.: Uno de los mayores retos de la película fue conservar la apariencia de realismo y de directo, pero sin por ello sacrificar la narrativa ni el aspecto visual de la película. No queríamos que en ningún momento se volviera demasiado incómoda para el espectador. P.P.: Bueno, es el lenguaje de la televisión, del reportaje, era lo que pedía la historia que contábamos, cómo la queríamos contar. Es cierto que hay momentos de mucha tensión y eso se refleja en el lenguaje de la cámara también.

¿Es REC una crítica a la telebasura, al sensacionalismo informativo y a los reality-shows?
J.B.: Más que una crítica, creo que hay en la película una reflexión sobre el medio televisivo, sobre como fagocita y reinventa la realidad, sobre sus límites éticos y morales. Y todo ello metido dentro de una experiencia de terror total hecha para entretener. P.P.: Sí, es una reflexión y, si me apuras, una exposición cruda de la realidad. Creo que a un programa de éstos le encantaría poder estar presente en un estallido de violencia y muerte como el que retrata la película, y sus reacciones creo que serían muy parecidas o idénticas.

Sorprenden ciertos elementos costumbristas y el humor de algunas secuencias, ¿habéis incluido todo esto para “desengrasar” de tanta tensión y miedo?
J.B.: El tipo de humor que hay en la película sirve, en efecto, para relajar al espectador en determinados momentos, pero es un humor realista acerca de una comunidad de vecinos perfectamente reconocible. No creemos que rompa con el tono terrorífico de la película, sino más bien que lo enriqueciera y le diera un contrapunto humano y distendido.
P.P.: Es como el algodón antes del pinchazo, ¿no? De todas formas, el humor nace de la realidad, o de cómo nosotros ponemos el acento en ciertos aspectos de la realidad, sin ánimo de parodiar en absoluto.

Con el éxito en Internet y mediático de la promoción de REC, ¿os gusta que se compare vuestra película con La bruja de Blair?
J.B.: Adoro esa película y como fue promocionada vía Internet. Pero creo que REC se parece mucho más a otras pelis o a muchos programas de televisión, sin ir más lejos, y su promoción en Internet ha sido mucho más convencional, no demasiado distinta a la de cualquier otra película actual. Nunca nos planteamos, por ejemplo, hacer creer a nadie que los hechos que acontecen en la película sean reales. Por otro lado, tampoco creo que nadie se lo hubiere creído.