03/08/2017 - LOCARNO 2017: La preciosa Piazza Grande de Locarno acogió el estreno mundial de Tomorrow and Thereafter, en la que Noémie Lvovsky ilumina los rincones más oscuros de nuestro corazón

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ficha de la película], dirigida y protagonizada por ese volcán de creatividad que es Noémie Lvovsky y estrenada a escala mundial en la Piazza Grande de Locarno, nos cuenta una fábula sencilla que esconde un subtexto tan rico como imposible de expresar con palabras. Un mundo hecho de emociones demasiado fuertes e imposibles de contener en un cuerpo que solo pide ser escuchado, comprendido y liberado. En este sentido, lejos de las palabras, la magia del cine consigue llegar a los rincones más ocultos de nuestro ser.

Mathilde (interpretada por la jovencísima y sorprendente Luce Rodríguez) tiene nueve años. Es una chiquilla inteligente con pocos amigos. Mathilde es distinta o, más bien, lo es su vida. Cuando regresa a casa, es ella quien debe preocuparse de su madre, con quien vive a solas desde el divorcio de sus padres. La suya no es una madre como las demás: frágil, a caballo entre la locura y la hipersensibilidad, su madre (extraordinaria Noémie Lvovsky) se agarra como puede a una realidad que no consigue decodificar instaurando con su hija una relación fusional que se parece a una verdadera historia de amor.

Si bien está pautada con momentos de gran onirismo (como el vuelo ligero del búho parlante que Mathilde ha recibido como regalo de la madre) que nos recuerdan a joyas directamente salidas del Studio Ghibli, Tomorrow and Thereafter emana una fuerza absolutamente terrenal. Mathilde tiene hambre: de vida, de amor, de certidumbre (in primis, en lo que respecta a no ser abandonada por la persona que más le importa). La soledad que viste a todos los personajes, como un abrigo un tanto raido pero extremadamente caluroso, se transforma gracias a sus gestos, capturados por la cámara de Noémie Lvovsky, en un auténtico personaje. Es precisamente esta soledad, amiga y enemiga, la que desliza la película desde la ligereza de un relato hasta la complejidad de la realidad. Aunque Tomorrow and Thereafter no insiste en las dificultades “prácticas” de una relación de madre e hija tal y como aparece en pantalla, la cinta no cae nunca en lo inverosímil. Noémie Lvovsky, en efecto, deja en cierto sentido aparte la “verosimilitud” de la vida cotidiana para concentrar su observación en las emociones que vibran bajo la piel de sus personajes, en aras de entender la verdad que la así llamada locura trata de esconder. Justamente a través de una danza final, desesperada y liberatoria las dos protagonistas consiguen que explote ese volcán emocional que nunca antes habían podido expresar con palabras. Como si sus cuerpos, a pesar de las dificultades que los atenazan, no pudieran contener esa verdad que se llama vida. Mathieu Amalric (que interpreta al padre de Mathilde) aparece al final de la película como un ilusionista dispuesto a recibir los aplausos del público tiempo después de que haya caído el telón. Su misteriosa ligereza regala a la relación entre Mathilde y su madre una posible vía de escape, radical pero necesaria.

Tomorrow and Thereafter es una producción de F Comme Film, France 2 Cinéma y de su agencia de ventas internacionales, Gaumont.

(Traducción del italiano)