02/07/2018 - KARLOVY VARY 2018: El documentalista ucraniano Roman Bondarchuk prueba suerte en la ficción combinando fantasía y realidad en una mirada a un aspecto diferente del nuevo e inexplorado Este

Roman Bondarchuk es un renombrado documentalista que alcanzó la fama con el mediometraje Euromaidan. Rough Cut (2014), el cual codirigió y que fue proyectado en el IDFA. Un año después, su primer largometraje documental, Ukrainian Sheriffs [+lee también:
tráiler
ficha de la película], recibió el premio especial del jurado en el IDFA. En su documental más reciente, Dixie Land [+lee también:
tráiler
ficha de la película], Bondarchuk regresó a su provincial nativa de Jersón para seguir a una banda de jazz infantil. Esta misma región sirve como escenario para su debut en el mundo de la ficción, Volcano [+lee también:
tráiler
entrevista: Roman Bondarchuk
ficha de la película], filme que gozó de un estreno mundial en la competencia East of the West en el 53^o Festival de Cine Internacional de Karlovy Vary.

Lukas (Serhiy Stepansky), de 35 años de edad, trabaja como intérprete en una misión de la OSCE. Este termina perdiéndose mientras conduce por la inmensa estepa del sur de Ucrania, abandona a su grupo para buscar ayuda, pero cuando regresa el automóvil y las demás personas ya no están allí. Sin ningún lugar a donde ir, Lukas busca refugio en un pequeño pueblo de la cercanía. Allí se gana la confianza de un excéntrico local, Vova (Viktor Zhdanov), quien vive con su joven hija, Marushka (Khrystyna Deilyk) y con su despótica madre. Después de aceptar la hospitalidad de Vova, Lukas queda cautivado por lo absurdo y extraño de la región y de sus habitantes. Mientras lucha por escapar, deberá enfrentarse a una serie de situaciones extremas, pero también contará con el tiempo para la introspección y para buscar un estado de felicidad verdadero.

En esta primera obra de ficción, Bondarchuk hace uso de muchos elementos que eran la base de su trabajo documental. Ambienta la trama en un área rural que prácticamente está en medio de la nada, en donde existe una delgada línea entre la tragedia y la comedia. Si se considera la vívida sobrexposición de los personajes, muchos de los cuales son interpretados por gente de la localidad, la película podría haberse convertido fácilmente en una farsa. Más bien, el director decide presentar su historia de una manera vibrante y realista, gracias a la cinematografía de Vadym Ilkov. Todo esto, en conjunción con el enfoque serio de todos los elementos, hace que a la película entera la acompañe la sensación de que se trata de un documental, incluso cuando la narración alcanza el punto en donde es fantasía pura.

Volcano parece casi ser un trabajo autobiográfico, por esta razón este viaje a través de la paranoia y las estepas también resulta absurdo para Bondarchuk. El director es originalmente de Jersón, pero al haberse criado en Kiev este es tan ajeno a este sitio como Lukas. También, este héroe, interpretado de una manera incómodamente emotiva por el aclamado diseñador de sonido Stepansky (conocido por sus colaboraciones con Myroslav Slaboshpytskyi en The Tribe [+lee también:
tráiler
ficha de la película]), en su primer papel como actor, tiene la misma edad que el director, también es un transeúnte y se embarca en una búsqueda interna similar. De forma paralela, Ucrania pasa por una experiencia parecida.

Volcano existe en el punto en donde la fantasía se encuentra con la realidad para convivir en harmonía. Al ofrecer solo un vistazo, Bondarchuk invita al público a su encantador universo paralelo en donde el nuevo e inexplorado Este todavía resulta atractivo sin llegar a causar miedo.

Volcano es una coproducción ucraniana, alemana, monegasca, de Olena Yershova (Tato Film) junto con Tanja Georgieva-Waldhauer (elemag pictures GmbH), Michel Merkt (KNM), y Dar’ya Averchenko (South), y fue financiada por  Ukrainian State Film Agency  y MDM Fund. El agente de ventas alemán Pluto Film se encarga de sus ventas a nivel mundial.

(Traducción del inglés por Javier Campos)