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BLACK NIGHTS 2023 Competición

Crítica: Misericordia

por 

- Emma Dante confirma toda su fuerza expresiva con su tercer largometraje, que retrata una cruda realidad dominada por la pobreza, la ignorancia y la violencia sobre las mujeres

Crítica: Misericordia

La madre de Arturo era joven y guapa, pero recibió una paliza cuando su hijo aún estaba en el vientre materno y murió poco después de darle a luz. El comienzo no puede ser más estremecedor para Misericordia [+lee también:
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, la nueva película de Emma Dante, con un brutal feminicidio que marca el tono de la degradación y la miseria humana que los espectadores presenciarán posteriormente durante los 90 minutos que siguen. Tras su debut en 2013 con Via Castellana Bandiera [+lee también:
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(premiada con la Copa Volpi a la mejor actriz para la protagonista Elena Cotta en Venecia) y su regreso a la gran pantalla en 2020 con Le sorelle Macaluso [+lee también:
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(galardonada con el premio Pasinetti y el premio Lizzani en el Festival de Venecia, así como con 5 premios Nastri d'Argento), la estimada directora de teatro y dramaturga de Palermo estrena ahora su tercer largometraje —basado en su obra homónima y escrito con la ayuda de Elena Stancanelli y Giorgio Vasta— a nivel internacional en la competición principal del Festival Black Nights de Tallin, tras el estreno de la película a nivel mundial como proyección especial en la 18.ª Fiesta del Cine de Roma. Se trata de una historia sangrienta y visceral que explora una realidad insoportablemente dura, una realidad sumida en la pobreza y la ignorancia, donde las mujeres son explotadas y agredidas sexualmente de todas las formas posibles. Y donde Arturo, que vive con una discapacidad intelectual desde que nació y tiene la edad mental de un niño, representa la única esperanza.

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"Lo hincharía a puñetazos y a besos al mismo tiempo". Esa es la frase que resume a la perfección el amor/odio que este pobre joven—que ahora tiene 18 años, no habla y no se está quieto ni un segundo— despierta en cualquiera que se ocupe de él. Estamos en Sicilia, en una pequeña ciudad costera formada por chozas y chabolas destartaladas, rodeada de chatarra y basura y dominada por una majestuosa montaña de la que, de vez en cuando, cae alguna que otra toca. El huérfano Arturo (Simone Zambelli, bailarín de profesión, pero también actor de teatro) tiene ahora dos madres: Betta (Simona Malato) y Nuccia (Tiziana Cuticchio), dos prostitutas —a las órdenes del repugnante Polifemo (Fabrizio Ferracane)— que cuidan del niño entre caricias cariñosas y arrebatos de impaciencia, y que pasan a las manos entre ellas por cualquier nimiedad. La joven Anna (Milena Catalano), una nueva "trabajadora" por la que todos los hombres del establecimiento hacen cola, se une a su desdichado hogar, por lo que Arturo acaba teniendo tres madres. Juntas, le protegen del infierno que les rodea y que él, de alguna manera, se las arregla para no ver.

Misericordia no es precisamente una película con la que sentir paz y tranquilidad. La sensación de malestar se palpa en todas y cada una de las escenas, ya sea física o moralmente: pies que chapotean sobre el barro, agua que se filtra en las casas, cuerpos deformados por la edad, rostros masculinos crueles, la miseria de las relaciones humanas... Pero la fuerza expresiva de esta autora tan poco políticamente correcta, que no teme mostrar realidades desagradables y violentas ni abusos contra mujeres y personas vulnerables, alcanza su clímax cuando este malestar se convierte en una posibilidad de futuro diferente, de salvación, incluso para aquellos que se veían sin ninguna opción. La hermosa melodía de una famosa canción de Claudio Baglioni —dedicada a su hijo— es la encargada de acompañar esta historia increíblemente oscura que acaba llegando al núcleo de nuestros corazones. Tal y como explica la audaz Emma Dante, "la misericordia es la emoción que quiero nazca en mí cuando veo a una persona desafortunada; no debo compadecerla, sino sentir que comparto su desgracia", y la cineasta invita al público a hacer lo mismo.

Misericordia ha sido producida por Rosamont junto con Rai Cinema, y se estrenará en los cines italianos el 16 de noviembre a través de Teodora. Las ventas internacionales corren a cargo de Charades.

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(Traducción del italiano)

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