22/02/2012 - El pianista italiano habla de su colaboración con Eric Toledano y Olivier Nakache en la comedia que está conquistando Europa

Para quienes las han visto no es fácil olvidar su sugerente piano en Sotto falso nome, de Roberto Andò (premio a la mejor banda sonora en el festival de Aviñón), y en This is England [+lee también:
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ficha de la película], de Shane Meadows (nominada a los premios BIFA en 2006). Ludovico Einaudi, uno de los artistas con mayor aprecio y demanda en Europa, tiene una relación moderada con el cine. Sin embargo, en las últimas semanas el compositor turinés se ha visto en mitad del ciclón Intocable [+lee también:
crítica
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ficha de la película], película de Eric Toledano y Olivier Nakache que tras haber sido vista por 20 millones de franceses se prepara para conquistar el mundo (leer más). Einaudi nos cuenta qué se siente al componer la música de un gran éxito del cine europeo.

Ludovico Einaudi: “Es la primera vez que trabajo en una comedia y me alegra haber participado en una película con un humor sutil y elegante, al servicio de una historia que en ningún momento cae en el patetismo. Me gusta mucho la contraposición de los dos protagonistas: uno pertenece a la alta burguesía francesa, su vida está marcada por su minusvalía; el otro proviene de la periferia de París, está curado de espanto en la vida y la savia que corre por sus venas se transmite a esa gran mansión burguesa. La película me ha hecho reflexionar en dos mundos que pueden confluir y en la posibilidad de que la integración pueda arrojar un futuro a nuestra sociedad.

¿Por qué aceptó encargarse de la música de Intocable?
Vi y me gustaron las obras anteriores de Eric y Olivier. Esta película, además, tiene una dirección magnífica y escenas que poseen una buena carga emotiva, como la de la persecución en coche.

¿Cómo llevó a cabo su trabajo en la película? ¿Vio las escenas que iban a llevar música antes de componerlas?
Los directores tenían las ideas muy claras. Nos vimos y trabajamos juntos a menudo antes y durante la producción de la película. Montaron la cinta y me pidieron que hiciera los arreglos y los grabase en París, después de haber examinado las pausas y las emociones del film. Yo tuve mis exigencias y respeté las suyas.

¿Estaría dispuesto a renunciar al solo de piano que le caracteriza para cumplir con las exigencias de una película dada?
En Sotto falso nome empleé tanto el piano como instrumentos de cuerda; lo mismo pasó en la serie de televisión que surgió de This is England, en la que no se hizo uso de los temas de la película de Meadows. En cualquier caso, no me gustan los arreglos rimbombantes que se reproducen una y otra vez en cada película de Hollywood.

¿Tiene en mente nuevos proyectos con el cine?
Estoy a la espera de una propuesta importante. Acepté participar en un proyecto americano para una película de ciencia ficción que, de momento, se encuentra detenido. Mi sueño es musicar una gran película como Blade Runner, conservando, en todo caso, cierta libertad para decidir qué voy a componer.