email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

PELÍCULAS Italia

La prima cosa bella de Virzì

por 

A Bruno le basta mirar el rostro de su madre Anna, enferma en fase terminal, para sentirse invadido por os recuerdos. Verano de 1971, 38 años antes, Anna es elegida “madre más guapa” de la playa más concurrida de Livorno. Al pequeño Bruno no le gusta en absoluto, se avergüenza de su madre, tan liberada. Una joven de una belleza insolente en la Italia democristiana, urbanizada, con el fantasma del ’68 a la espalda y una crisis económica en curso, pero con 326 revistas en los quioscos. Esta madre tan “inconveniente” como inocente, echada de su casa por el marido y obligada a secuestrar a sus adorados hijos Bruno y Valeria, arruinará la vida de Bruno, lo obligará a sentir un eterno malestar, hasta el momento en el cual los tres se encontrarán en la habitación del hospital donde Anna se está muriendo.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

El realizador Paolo Virzì ha definido La prima cosa bella [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
una película “sobre el deseo de hacer las paces con la vida, encontrar un hogar, una patria”. El décimo largometraje del director toscano que mejor ha sabido recoger la herencia de la comedia a la italiana es quizás quien más debe al cine de Ettore Scola, sobre todo a Una mujer y tres hombres, y su aguda inteligencia.

La preocupación de la Anna de Virzì, interpretada alternativamente por Micaela Ramazzotti (de joven) y Stefania Sandrelli (a punto de morir), la emparenta directamente con la Adriana de Yo la conocía bien, de Antonio Pietrangeli, magistralmente encarnada por la misma Sandrelli en 1965. Virzì ha invertido en Ramazzotti la segunda fase de su carrera artística (y de su vida personal, ya que están casados) y a través de ella rinde homenaje a los muchos enormes personajes femeninos del cine italiano (en una escena donde Anna se lanza desde un coche, el director “roba” el póster de Dos mujeres, de Vittorio De Sica).

Lo que importa no es preguntarse si ha nacido una “estrella”, sino hasta qué punto Micaela logra ser “moderna” en un cine que lucha para seguir la vida real. “No es un Amarcord, ni una película nostálgica”, precisa Virzì, que añade “el pasado no es narrado con un tono triste. Las conclusiones se hacen en el presente: una mamá desenfrenada y heroica que empuja a sus hijos a buscar su propio destino".

Virzì no sólo dirige de modo magistral a Micaela y Sandrelli, sino que logra de Valerio Mastandrea y Claudia Pandolfi, en los papeles de Bruno y Valeria respectivamente, sendas interpretaciones nítidas y densas, y el conjunto de actores no protagonistas (Marco Messeri, Fabrizia Sacchi, Sergio Albelli, Paolo Ruffini, Emanuele Barresi, Isabella Cecchi, los jóvenes Giacomo Bibiani, Aurora Frasca, Giulia Burgalassi y Francesco Rapalino) da lo mejor de sí. La cinta se mueve en largos planos secuencias que subrayan sus interpretaciones. La fotografía de Nicola Pecorini, experto en el uso de la steadicam, está a la altura de su fama de colaborador de Terry Gilliam, Oliver Stone, Roman Polanski o Bernardo Bertolucci. El montaje está firmado por el debutante Simone Manetti

La película, cuyo guión ha sido escrito por Virzì y Francesco Bruni y Francesco Piccolo, ha sido producida por Motorino Amaranto, Indiana Production Company y Medusa Film. El estreno, que tendrá lugar el 15 de enero con 400 copias, coincidirá con la llegada a las salas de Avatar, de James Cameron, que espera continuar en Italia el increíble éxito que está acumulando en todo el mundo (el pasado fin de semana se ha convertido en la película más taquillera de la historia del cine en España).

Esta competencia ha desencadenado un encendido debate (el periodista Alberto Crespi ha escrito en L'Unitá que “un mercado sano debería poder absorber ambos filmes”). Virzì ha cerrado la polémica de modo sutil: “Cuento con los espectadores que no lograrán ver Avatar”. El único efecto digital de La prima cosa bella son los 350 figurantes que se convierten en una muchedumbe de 3.000 personas en el concurso de Miss Verano Bagni Pancaldi 1971.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del italiano)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy