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BERLINALE 2012 Panorama / Francia

Indignados muestra la revolución según Tony Gatlif

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Una africana sale del mar y corre por campos y pinedos hasta perder el aliento. Acaba de entrar ilegalmente en Europa; su periplo por el Viejo Continente, de Grecia a España, pasando por París, es el hilo conductor de la comprometidísima Indignados [+lee también:
tráiler
entrevista: Tony Gatlif
ficha de la película
]
, dirigida por Tony Gatlif y presentada esta mañana en proyección especial en la sección Panorama de la 62ª Berlinale.

¡Indignaos!, de Stéphane Hessel, el panfleto que se propagó en todo el mundo el año pasado como un reguero de pólvora, cuenta así con una primera adaptación al cine, muy personal, de la mano del efervescente director de Exils (premio a la mejor dirección en Cannes en 2004). Su película es contundente y eficaz a la hora de transmitir un mensaje sociopolítico, humanista y “revolucionario” cimentado en los valores de la resistencia a la exclusión y a la dictadura del dinero.

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La película mezcla ficción y documental con un montaje trepidante y un ritmo marcado por una música omnipresente. Indignados prueba una gran inventiva y una multitud de temas y lugares: precarios campamentos de inmigrantes ilegales en las desangeladas estaciones de Grecia, colchones y tiendas de vagabundos en las aceras de París, manifestaciones de indignados españoles, eco de las revoluciones árabes, obras de construcción inmensas en la periferia de Madrid, abandonadas…

Betty (Mamebetty Honoré Diallo) yerra de un país a otro, en tren o ferry, del campo a las ciudades de opulentas vitrinas en las que trata de escapar de la policía. La película retrata a través de su viaje una Europa que va mal (“aquí se sufre”), las desilusiones de los inmigrantes (“más vale ser un animal que un ser humano ilegal”) y ciudadanos con el deber de rebelarse pacíficamente (“hoy soy yo, mañana serás tú, en un mundo de fantasmas indiferentes”; “levántense del sofá, apaguen el televisor, gentes de Europa, ¡álcense!”).

La dinámica Indignados incrusta en su metraje citas de Stéphane Hessel, miembro de la resistencia durante la Segunda Guerra Mundial sobreviviente de una deportación a Buchenwald: “la dictadura actual de los mercados financieros amenaza la paz y la democracia”, “el poder del dinero nunca había sido tan grande, insolente, egoísta con todos”, “la libertad descontrolada del zorro en el gallinero”. El efecto de estas frases está en perfecta armonía con el estilo desenfrenado de Gatlif, que encadena encuentros simbólicos (naranjas rodajdo por las calles hasta el mar en memoria del licenciado tunecino reconvertido en vendedor ambulante cuya inmolación desató la revolución del jazmín; una lata empujada por el viento y es aplastada, en representación de los inmigrantes ilegales). Con la bandera de la revolución en la mano, Indignados se aleja de la floritura para lanzar su consigna de lucha. Su melting pot, su mosaico de culturas, tiene la fuerza necesaria para llevarse todo a su paso.

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(Traducción del francés)

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