02/10/2014 - El gobierno ha preservado el alto nivel compromiso del Centro Nacional de Cine y la Imagen Animada, y definido sus prioridades

En un ambiente económico general bastante tenso que obliga al estado a intentar racionalizar sus gastos para conservar un mínimo de márgenes de maniobra, el presupuesto del 2015 asignado al apoyo de las industrias cinematográficas, audiovisuales y multimedia ha salido relativamente bien parado. Con un total de 663 millones de euros, pierde sin embargo un 5% con respecto al proyecto de presupuesto inicial del 2014. En cambio, el gobierno ha decidido no agujerear el CNC para contribuir al presupuesto general del estado, como solía hacer estos últimos años, a pesar del gran perjuicio a los profesionales del sector.

Fundado sobre un mecanismo de puesta en común entre los distribuidores cinematográficos y audiovisuales que incita a la reinversión y a favorecer la creación, el sistema francés hace que el CNC perciba directamente tres impuestos cuyos ingresos son a continuación redistribuidos entre toda su red. Un acercamiento detallado al presupuesto para el 2015 prevé unos 134,4 millones de euros del precio de las entradas de cine (10,72% del precio de la entrada y una previsión de 195 millones de entradas este año, que tiene posibilidades de ser superada), 475 millones de euros de los servicios de televisión (una cantidad que se reduce en 52,5 millones con respecto al 2014, debido a las tensiones que afectan a las cadenas históricas sobre el plan de ingresos publicitarios, el aumento de competencia y la fragmentación de la audiencia) y 21 millones de euros provenientes de la venta en vídeo y en VOD (un total en retroceso de 7 millones, con los recursos estables generados por la segunda aún sin constituir una fuente de crecimiento suficiente para equilibrar la disminución del aporte de la primera). Para compensar la contracción global de los ingresos, el CNC movilizará su reserva “de solidaridad”, con un total de 33 millones de euros en 2015.

Los dispositivos fiscales completan el panorama con unos 22,7 millones de euros estimados para las Sofica (sociedades para la financiación de la industria cinematográfica y audiovisual) que permiten a particulares invertir en la producción (120 películas -64 de ellas, primeros o segundos largometrajes- y 32 obras audiovisuales se han beneficiado de ellas en 2013) y los créditos fiscales de cine (estimados en 65 millones de euros para el 2015, de los cuales 18 se destinarán al crédito fiscal internacional), audiovisuales (72 millones de euros) y de videojuegos (8 millones de euros). 

El gobierno ha definido tres grandes prioridades para la actividad del CNC (presidido por Frédérique Bredin) en 2015: apoyar la creación y la diversidad cultural, la competitividad de la red, y la actividad y el empleo. Directivas que pasarán a través de medidas para consolidar el tejido de las empresas del sector y reforzar la capacidad de inversión y exportación, desarrollar fuentes alternativas de financiación, colocar nuevos apoyos para la oferta legal de VOD (a través de un doble mecanismo de ayudas automáticas y selectivas), mejorar la transparencia en las relaciones entre profesionales y desarrollar una política de auditoría, controlar los costes (en particular limitando las ayudas públicas para las cintas con presupuestos muy elevados en cuanto a los cachés de actores y autores), continuar los esfuerzos de educación visual de los jóvenes (desde la escuela primaria hasta el final del bachillerato) y valorizar el patrimonio cinematográfico (a través del apoyo a las cinematecas).

(Traducción del francés)