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TAQUILLA Francia

Francia vendió más de 150 millones de entradas en los primeros nueve meses de 2016

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- Después de un mes de septiembre muy positivo, la afluencia de público a los cines franceses va viento en popa en este 2016, lo que repercutirá en la negociación sobre la cronología de medios

Francia vendió más de 150 millones de entradas en los primeros nueve meses de 2016

Al cabo de un mes de septiembre en el que la venta de entradas aumentó un 5,1% en relación con el mismo periodo del año anterior, la afluencia de público a los cines franceses en 2016 ha arrojado nada menos que 150,2 millones de espectadores durante los tres primeros trimestres del año, es decir, un 4,1% más que en los nueve primeros meses de 2015, y una cuota de mercado de un 34,8% para la producción gala (mientras que el cine americano gozó de un 56,3% y el resto de nacionalidades se repartió el 8,8% restante).

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Estos resultados corroboran la enorme solidez de la explotación cinematográfica en Francia y la apetencia del público por el cine en la gran pantalla es, sin duda, una gran noticia, pero presenta el riesgo de complicar seriamente el reinicio de las negociaciones sobre una eventual reforma de la cronología de ventanas de explotación. El óptimo estado de salud de los cines aporta, en efecto, agua al molino de los argumentos de sus representantes, que han afirmado bien claro que rechazarán todo nuevo acercamiento de cualquier otra ventana de explotación (la primera que la sigue, a cuatro meses de distancia de un estreno en cines, la integran el vídeo, el DVD y el streaming bajo demanda). No obstante, se hace relativamente evidente que determinadas películas de autor (en especial, las obras europeas no nacionales), expulsadas tempranamente de la cartelera (a pesar de los esfuerzos del CNC con los acuerdos recientes de compromiso de programación y difusión) en razón de la rotación impuesta por la enorme cantidad de novedades que cada semana llegan a la cartelera, se aprovecharían bien de una difusión adelantada en vídeo a la carta y sistemas de geobloqueo.

Por lo demás, el deseo de la televisión de pago Canal+ (primera fuente de financiación de la producción cinematográfica francesa) de adelantar unos meses su ventana (actualmente a diez meses vista del estreno en cines) provocaría sin duda un efecto dominó en la ventana anterior del vídeo. Esta perspectiva es rechazada a priori por los dueños de los cines. Lo que está claro es que los debates serán animados y que cada actor involucrado sostendrá sus posiciones en un panorama bien difícil de descifrar, puesto que, por un lado, los intereses económicos inmediatos hoy no tienen por qué ser los del mañana y, por otro, las premisas del futuro aún están muy lejos de poder contribuir lo suficiente a la financiación del cine como para justificar un descalabro del modelo. Con todo, cabe esperar que se produzcan ciertos ajustes más o menos marginales, sobre todo con el propósito de preservar la renovación de talentos artísticos que necesitan un tiempo mínimo de desarrollo (y, por tanto, de financiación y exposición) antes de llegar a madurar y poder brindar ulteriormente a sus difusores material de calidad.

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(Traducción del francés)

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