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SARAJEVO 2017 Competición

Daybreak: entre lo ético y lo existencial

por 

- El primer largo del cineasta albano Gentian Koçi es una película de gran sutileza emocional y psicológica

Daybreak: entre lo ético y lo existencial
Ornela Kapetani (centro) en Daybreak

El cineasta albano Gentian Koçi cuenta directamente lo que la heroína de su largo debut Daybreak [+lee también:
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, que se estrenó recientemente en la competición del Festival de Sarajevo, debe pasar para poder sobrevivir. Al comienzo de la película, la joven madre Leta (Ornela Kapetani) se despierta para alimentar a su niño, minutos antes de que el casero de su pequeño apartamento en las afueras de Tirana llame a la puerta, demandando tres meses de alquiler que todavía están sin pagar.

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Llevando a su hijo, Leta camina por el barro entre casas dilapidadas y construcciones abandonadas a la estación de autobús, donde tiene que abrirse paso entre la multitud para llegar al centro y dejar a su niño con una niñera (que también reclama su pago), para después reunirse con su patrona a tiempo parcial. Ariana (Jonida Beqo) es una mujer casada que vive bien en Francia, y Leta cuida de su madre Sofia (Suzana Prifti), la cual no puede dejar la cama. 

Leta está más que capacitada para el trabajo, siendo previamente una enfermera que fue despedida por administrar eutanasia ilegal. La condición de Sofia lleva este tema de nuevo a la superficie y a un ligero enfoque. El problema se convierte en existencial para Leta cuando es expulsada de su apartamento y debe mudarse a la casa de Sofia con su hijo sin que se entere Ariana. Mientras tanto, el cartero que entrega la pensión de Sofia va apareciendo de forma más significativa. 

Leta no solo se enfrenta a una sociedad pobre y corrupta, sino que también debe tratar sus propias normas éticas directamente. ¿Qué es moral cuando tu hijo y tú no tienen un techo sobre sus cabezas ni comida que poner en la mesa? ¿Cómo puedes acabar con el dolor de una persona si eso significa perder todavía más que tu incierta seguridad material?

Daybreak es una película de gran sutileza emocional y psicológica, y Koçi trata los problemas con pasos cuidadosamente medidos. La mayoría de la acción tiene lugar en interiores, y el apartamento de Sofia se convierte en un microcosmo de los problemas de Leta. Trabajando con el veterano director de fotografía Ilias Adamis (Correction, Chromium [+lee también:
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), el director crea una elaborada puesta en escena donde cada pequeño movimiento facial de los actores es minuciosamente complementado por la iluminación y la distancia del foco, especialmente en las escenas que comparten las dos maravillosas actrices, Kapetani y Prifti. No se requiere exposición, y debido a la salud de Sofia, es frecuentemente incapaz de hablar o moverse. Así cuando Leta la encuentra, sorprendentemente, sentada en un sofá con su hijo en brazos, la escena tiene mayor impacto. 

Daybreak es un potente debut de un cineasta cuyos créditos anteriores incluyen más de nueve áreas diferentes, desde guionista-director a fotógrafo a gerente de la localización. En esta película se centra en escribir, dirigir y producir, y obviamente eligió un reparto más que decente para crear un logrado y sutilmente emocional drama. 

Esta película fue coproducida por la compañía basada en Tirana Artalb Film, del propio Koçi, y la compañía griega Graal Films. Wide Management tiene los derechos internacionales.

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(Traducción del inglés por Daniel Doblado)

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