Vetle, el hijo de 5 años de edad de Nora y Solveig, murió hace dos años en una excursión por la montaña. La pena causada por su muerte ha dañado su relación. Nora, la madre biológica del niño, se ha vuelto cada vez más desagradable por el dolor de la pérdida. Aunque Solveig quiso a Vetle tanto como ella, Nora se cuestiona cada vez más la sinceridad del duelo de Solveig.