El 23 de marzo de 1994, el candidato a la Presidencia de la República por el Partido Revolucionario Institucional, Luis Donaldo Colosio, fue víctima de un atentado que acabó con su vida durante un mitin en Lomas Taurinas, Tijuana. El asesinato de Colosio fue un hecho que sacudió al país y que marcó a varias generaciones de mexicanos. Dieciocho años después, sigue teniendo relevancia. A pesar de que la investigación de la Fiscalía Especial señaló a un solo culpable, la opinión pública nunca se convenció de que actuara solo. Tampoco estuvieron nunca claros los móviles del asesino. Estos hechos reales son el punto de partida de la película. Una historia en la que Andrés Vázquez, un experto en inteligencia, lleva a cabo una investigación secreta y paralela a la investigación oficial. Pero al mismo tiempo, otro experto agente, El Seco, recibe la orden de eliminar a todos los testigos y hacer desaparecer las evidencias del asesinato.