Dejar la bebida significa sufrir, continuar implica la muerte. Tinou debe seguir unas reglas muy estrictas para recibir un nuevo hígado. Anchi también sufre: vive un presente mediocre que hace que su pasado glorioso reluzca aún más; ese pasado que lo atrapa en forma de carta procedente de África del sur. Tinou sabe que Aschi no se irá sin él, pero su salud es la máxima prioridad. Durante la operación sueña que consigue todo lo que no pudo. Adelanta el viaje a África y muere en los brazos de Miriam, la anestesista. Aschi deberá emprender el viaje sin él.