10/05/2010

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ficha de la película] es todo lo que se necesita como carta de presentación en el mundo del cine hoy en día, pero Yorgos Tsourgiannis también tiene un título universitario del Reino Unido y un Master en Gestión Audiovisual por la EMAM italiana, y puede añadir a su currículum numerosos anuncios de televisión y una gran experiencia como director de producción en la prometedora empresa griega Boo Productions. El año pasado dio claramente el gran salto a la primera línea con la que parece ser una brillante carrera en la industria; la selección de Tsourgiannis en la iniciativa Producers on the Move, promovida por European Film Promotion, así como la de su largometraje en el Festival de Cine de Cannes, no hará sino asentar esta nueva posición.

Cineuropa: Tras los excepcionales resultados fuera de Grecia, la Academia de Cine Helénico (ACH) reconoció tu trabajo en Canino con cinco premios. ¿Qué significa todo eso para un Producer on the Move?
Yorgos Tsourgiannis: Que nuestros colegas griegos valoren de este modo la película es fantástico porque se trata de los primeros galardones que otorga la recién fundada Academia. Es un símbolo de gran importancia porque supone la culminación de las ideas de un movimiento popular organizado, en este caso el de los directores griegos que protestaban contra la corrupción de los Premios Estatales y pedían una nueva ley de cine.

¿Cómo ha afectado la producción de una película como Canino, con tanto éxito en el extranjero, a un productor como tú, con un ojo siempre puesto en las coproducciones europeas?
Efectivamente, todo ello ha abierto muchos canales de comunicación y nos ha permitido crear una red de colaboradores. Facilita el contacto con la gente y el hecho de que te escuchen. Esto es especialmente importante cuando uno viene de Grecia, donde habitualmente hay una baja producción y no existe una gran tradición de coproducciones. Este año ha sido particularmente bueno para el cine griego, con títulos potentes como Strella [+lee también:
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ficha de la película], de Panos Koutras; Plato’s Academy [+lee también:
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ficha de la película] (finalista Premio LUX 2010 del Parlamento Europeo), de [Filippos] Tsitos, y Canino, de Lanthimos, que ha sido premiada en grandes festivales y ha devuelto a Grecia a la escena internacional. Y lo que queda por venir...

Ahora eres miembro de la Academia. ¿Qué propondrías para ayudar a los productores griegos a que lleven su trabajo más allá de sus fronteras?
Hay muchas actividades de formación en marcha en Europa, muchos mercados para la coproducción, talleres de desarrollo de guiones y gente que hace uso de las redes activas existentes con frecuencia. La Academia puede hacer tanto de un eje informativo para los productores griegos como de vínculo entre estos y los socios europeos. Por último, creo que puede desempeñar un papel crucial en ejercer presión al gobierno para que lleve a cabo una reforma completa a nivel nacional en formación cinematográfica. De todas formas, creo que la Academia ya está en todas estas cosas.

¿Cómo crees que afectará a la industria cinematográfica griega la envenenada coyuntura económica actual?
No me gusta el hecho de que la economía griega haya llegado a este punto antes de que intentáramos hacer algo. La situación ejercerá mucha presión en los fondos públicos e, inevitablemente, la competencia será mucho mayor; pero esto no tiene por qué ser el infierno. Los proyectos tendrán que desarrollarse con un mayor rigor, y eso podría dar lugar a mejores películas. También debería fomentar las coproducciones, tanto en ámbito nacional como, más importante, internacional. Otros países están en la misma posición.

¿Cómo ha sido hasta ahora su experiencia como Producer on the Move?
Ya he recibido reseñas y modelos de trabajos de algunos colegas. Me apasiona ser parte de esta dinámica de desarrollo con gente con la que comparto visión y gustos cinematográficos. Al igual que muchos productores europeos, veo las coproducciones como la única solución viable para un cine europeo competitivo y de calidad. Tengo muchas ganas de encontrarme con mis homólogos en Cannes.

¿En qué otros proyectos está usted trabajando?
Para Boo Productions estoy desarrollando tres largometrajes con tres directores muy diferentes y especiales: L, el primer largometraje de Babis Makridis, que acaba de recibir apoyo del fondo MEDIA; la cuarta película del galardonado Christos Voupouras, titulada Seven Kinds of Rage, y Luton, dirigida por Michalis Kostantatos y seleccionada para el Cinelink 2010. Todas ellas han sido concebidas originalmente como coproducciones.