27/08/2012 - Taskovski Films acaba de abrir una nueva oficina en la ciudad natal de Irena Taskovski, Banja Luka

Irena Taskovski, fundadora y directora ejecutiva de Taskovski Films, cuenta con un equipo de cuatro personas y dio a conocer el nombre de su compañía produciendo y distribuyendo éxitos documentales como Czech Dream, People I Could Have Been and Maybe Am, Cooking History y Katka entre otras. La compañía ha seleccionado recientemente títulos de directores emergentes como Mustafa’s Sweet Dreams, película que Angelos Abazoglou presentó en la Berlinale; El Bella Vista, de la uruguaya Alicia Cano, que se estrenó hace poco en Karlovy Vary, y La chica del sur, del argentino José Luis García, que se estrenará mundialmente en Toronto tras hacerse con el premio del público en BAFICI.

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La empresa tiene su sede en Londres, cuenta con una sucursal en Praga, tiene otra en Trieste y acaba de abrir una oficina en la ciudad natal de Irena, Banja Luka (Bosnia-Herzegovina).

Cineuropa: ¿Por qué eligió Banja Luka?
Irena Taskovski: A medida que los mercados se amplían y nuevos países y regiones se colocan en el punto de mira, nosotros intentamos seguir esos cambios y, además, queremos ir un paso por delante. Fuimos a Praga en 2003 para crear Czech Dream, que fue un excelente reflejo de la sociedad checa y de su punto de vista respecto a su adhesión a la UE. Los cambios en la sociedad y la transición de un sistema político a otro son un campo fértil para crear temas interesantes, y eso es lo que espero que ocurra en los Balcanes en los próximos años. Czech Dream es exactamente el tipo de película que nos interesa: aborda un tema bastante serio con mucho sentido del humor y eso es justo lo que tienen las películas de los Balcanes.

Bosnia está a punto de entrar en el programa MEDIA, lo cual supondrá una gran oportunidad para desarrollar una práctica seria de producción en el país. Siempre buscamos nuevos talentos que traigan un punto de vista fresco sobre la sociedad y lo expresen con originalidad, y les ayudamos a desarrollarse y a salir a la luz, como hicimos con García, Filip Remunda (Czech Dream), Helena Třeštíková (Rene, Katka), Boris Gerrets (People I Could Have Been and Maybe Am), y Audrius Stonys (Ramin).

¿Cómo pretende hacer eso en Bosnia?
Primero debemos educar a la gente y aprovechar su potencial para que se reconozca su talento. Últimamente nos hemos involucrado en programas educativos en países en vías de desarrollo, como la Documentary Resource Initiative en India o Chiledoc en Chile. En esas iniciativas los directores tienen buenas ideas, pero no saben cómo desarrollarlas o hacerlas interesantes para el mercado internacional. Eso es exactamente lo que hacemos: enseñar a desarrollar guiones y presentaciones internacionales, y cómo acceder a fondos internacionales y ser comercialmente viables sin perder la creatividad específica. Tenemos mucha experiencia en esto y hemos participado como ponentes en talleres como el de Ex Oriente o SOURCES 2.

También trabaja con películas de autor de ficción, ¿ha pensado desarrollar este sector también en Banja Luka?
Ahora mismo estamos más centrados en los documentales, y en Bosnia hay muy poco dinero para la producción, por lo que pensamos que es mejor comenzar con un género que necesita menos financiación. Las reflexiones sociales se recogen y se plasman mucho mejor en forma de documental. También pretendemos organizar regularmente proyecciones de documentales de calidad en Banja Luka, una ciudad con un solo cine que tan solo proyecta películas comerciales. Si queremos que la gente entienda lo que es y se interese por los documentales creativos, primero deben tener la posibilidad de verlos. Actualmente la única oportunidad que tienen para eso es durante el festival internacional de cine Kratkofil Plus de la ciudad, que es solo un evento de cinco días en julio, y por eso queremos abrir un espacio para que tengan esa posibilidad durante todo el año. Esa es una de las partes más importantes de nuestro plan de desarrollo a largo plazo.

Además de Bosnia, ¿cómo va a trabajar en la región de los Balcanes?
Tenemos conexión con otras iniciativas de la región similares, como el Balkan Documentary Centre (donde estuve dando clases los últimos dos años), con sede en Sofía, y el Skopje’s International Festival of Creative Documentary MakeDox. Ambos se dedican a la educación y al desarrollo a varios niveles y cooperaremos para conseguir nuestro objetivo común.