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Valeria Bruni Tedeschi • Directora

"Me apetecía hablar del paso del tiempo"

por 

- Valeria Bruni Tedeschi compite por primera vez por la Palma de Oro y explica la metodología de trabajo que siguió en A Castle in Italy.

Valeria Bruni Tedeschi • Directora

Entrevista en la Croisette con Valeria Bruni Tedeschi, que ha presentado A Castle in Italy [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Valeria Bruni Tedeschi
ficha de la película
]
en la competición del 66º Festival de Cannes.

¿Cuál fue el punto de partida del guion?
Empecé a escribirlo hace cinco años a partir de una escena entre Nathan y Louise en el coche. Después, quería hablar de esa casa, de esa familia. Tenía imágenes como alguien que grita algo en la ventana. Poco a poco, las cosas se pusieron en orden con Noémie Lvovsky y Agnès de Sacy. Pero nos llevó mucho escribir el guion: tres años.

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Se habla a menudo de autoficción o autobiografía al referirse a su trabajo. ¿Cómo lo definiría usted?
La intimidad es lo que me interesa, tanto a la hora de dirigir a los actores como a la hora de escribir. Las palabras autoficción y autobiografía no se corresponden conmigo: creo que anulan un poco todo el trabajo que hago. Toda nuestra labor parece borrarse. Además, esa palabra hace referencia a un voyeurismo que no me gusta. Nosotros nos divertimos escribiendo este guion, tomando como punto de partida la vida.

¿Este trabajo de transformación tiene lugar frente al guion o tras la cámara?
Gran parte tiene lugar en la fase del guion. Necesito mucho tiempo para sentirme tranquila con mi guion. A continuación, esa transformación acontece en el casting, que constituye una etapa muy importante para mí. Reescribí la película en función de los actores que escogía y la química y las parejas que surgían. Hay una mezcla de actores y de no actores que me gusta y que encuentro muy fértil e inspiradora para todo el mundo. Por último, esta labor también se ejerce en los preparativos, en el rodaje y, sobre todo, en la sala de montaje, donde tiene lugar una nueva escritura. De hecho, hay como tres o cuatro fases de escritura distintas.

¿Por qué decidió usar como espacio temporal tres estaciones?
Me apetecía hablar del paso del tiempo, en relación con esa enfermedad que se desarrolla, hacer sentir la progresión inevitable y trágica de una enfermedad que, hace algunos años, podía avanzar de golpe de tres meses en tres meses. Poner las palabras Invierno-Primavera-Verano, en tres segundos, con un poco de nieve, algunos pájaros y flores, transmitía la idea deseada rápida y directamente al espectador sin necesidad de hacer nada más. En tres segundos, ya teníamos la sensación del paso del tiempo en la historia de amor. Para relatar un encuentro, si mostramos unos besos primeros en invierno y luego anunciamos la primavera, el espectador se entera al vuelo de que hace tres meses que están juntos. ¿Qué ha ocurrido en esos tres meses? Se han conocido un poco más: son importantes los primeros tres meses en el comienzo de una historia de amor.

La película aborda el fin del mundo y cuestiones existenciales. ¿Cómo sorteó el escollo del pathos?
No me apetecía. Si en el rodaje, en la interpretación de los actores, en el montaje, percibíamos que estaba ese patetismo, captábamos el peligro y tratábamos de evitarlo. Al mismo tiempo, la raíz del término pathos es el sufrimiento, así que no tengo miedo de él porque, en mi opinión, no hay que tener miedo de hablar del sufrimiento humano. También, las rupturas de ritmo hacen, quizá, que este pathos quede al margen puesto que, cuando aparece, uno cambia rápidamente a otra cosa, hay una burla, aparece algo cómico.

En su película, el personaje de Louis Garrel habla de cómo le disgusta su oficio de actor. ¿A usted le pasó algo parecido?
Puede que sí me haya llegado a sentir como una marioneta sin saber por qué era así. Me encanta actuar y conocer a grandes directores, pero con regularidad me ha ocurrido que tan pronto como pierdo el deseo por actuar, lo recupero. Esta pérdida del deseo la encuentro interesante. Hablé de ella en mi anterior película, Actrices, y vuelvo a tratar el asunto en lo que respecta a mi personaje, que deja de actuar, y al de Louis Garrel, que quiere dejar el oficio. Me gustó mucho la película de Manoel de Oliveira, Vuelvo a casa. Creo que es un asunto apasionante.

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(Traducción del francés)

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