email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

Bélgica / Francia / Suiza

Rémi Durin y Arnaud Demuynck • Directores de Yuku y la flor del Himalaya

"Las ideas de direcciùon de Rémi me hacían replantearme la manera de abordar la historia"

por 

- Entrevistamos a los directores de la cinta de animación para un público (muy) joven, que supone su salto al largometraje y se estrena en Bélgica y Francia

Rémi Durin y Arnaud Demuynck • Directores de Yuku y la flor del Himalaya

Hablamos con Arnaud Demuynck y Rémi Durin, directores de la película de animación para un público (muy) joven Yuku y la flor del Himalaya [+lee también:
crítica
entrevista: Rémi Durin y Arnaud Demuynck
ficha de la película
]
, que marca su paso al largometraje después de una larga y bonita experiencia en el cortometraje. La película se estrena en Bélgica y Francia el 19 de octubre, a través de Le Parc Distribution y Gebeka Films, respectivamente. 

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Cineuropa: ¿Cuándo empezó vuestra colaboración?
Arnaud Demuynck: Conocí a Rémi cuando él estudiaba en La Cambre, gracias a sus trabajos. Hablé con él cuando salía de clase para trabajar juntos. Hace 15 años que colaboramos.

Rémi Durin: Me hiciste trabajar en Une vie de chat [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
, que estabas produciendo, y para mí fue una bofetada. Trabajar en un estudio no tenía nada que ver con las clases de la escuela, pero quizás gracias a eso pude hacer un largometraje después. Sabíamos lo que era compartir con un equipo, organizarse, estructurar. 

¿Cuáles fueron los principales retos, obstáculos o escollos del paso al largometraje?
R.D.: Creo que tendemos a pensar que un largometraje es un cortometraje más largo, pero en realidad el tiempo de trabajo no se adiciona, sino que aumenta de manera exponencial. En los cortometrajes, a veces hacemos todo solos, pero en un largometraje hay que estar dispuesto a compartir para asumir la carga de trabajo, y también para multiplicar y recibir las buenas ideas que proponen los demás. Y abrirse a los demás no es algo tan evidente para un autor.

A.D.: En producción ocurre prácticamente lo mismo; estoy acostumbrado a las producciones, pero no hasta ese punto. Había que invertir el 20 % en Suiza, el 30 % en Francia, y el 50 % en Bélgica. Son grandes cantidades, hay que encontrar buenas colaboraciones artísticas y financieras. Seguí trabajando con personas a las que conocía muy bien, pero por primera vez, me asocié a otras estructuras, Artemis en Bélgica y Vivement lundi en Francia, porque como director había garantizado la estrategia de desarrollo, pero después necesité apoyo para la implementación. Fue un salvavidas.

¿Cómo es la dinámica de vuestro dúo?
A.D.: Soy autor-guionista, pero también productor. Cuando voy a ver a Rémi, voy a ver a un director. Yo no dibujo, no tengo universo gráfico. Necesito apoyarme en él para la imagen, y trabajo un poco más en el sonido.

R.D.: También trabajamos con Paul Jadoul, el director artístico. Pensamos esta película entre los tres. Cuando leíamos el guion con Paul, pensábamos en soluciones gráficas, en el ambiente de las secuencias, los colores, la estilización. Y después yo pensaba en la manera de contar las cosas. Es una partida de pimpón entre nosotros.

A.D.: Como guionista, en un momento dado llego a cierto límite, doy vueltas en círculos, la puesta en escena revelará las necesidades para mejorar la película, identificar las carencias o desequilibrios en la narración. Las ideas de Rémi y Paul me hacían revisar la manera de abordar la historia, y volver al guion. Lo excepcional en nuestro trío es que Paul es director artístico y también director técnico. Somos pocos para tomar las decisiones importantes, ganamos tiempo y energía. Y digamos que una película más corta es también una película más barata. Hablamos de 3 millones por 1 hora, mejor que 4,5 millones por 1 hora y media. Yo quería que el corazón vibrante de la película estuviera en los estudios L’Enclume de Bruselas. Y por eso el presupuesto tenía que ser asumible en Bruselas.

R.D.: Es cierto que, a menudo, vemos proyectos de iniciativa belga truncados por Francia por motivos de financiación. Había que ser creativo con la financiación para cumplir este sueño: hacer un largometraje de animación infantil belga.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del francés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Lee también

Privacy Policy