email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

Terry George • Director

El valor de levantarse

por 

- A través una auténtica historia, el irlandés Terry George se interroga, en su segundo largometrage, presentado en Berlín, sobre la indiferencia mundial ante el genocidio ruandés

Guionista fetiche de Jim Sheridan (In the Name of the Father, The Boxer), el irlandés Terry George también se ilustró como cineasta con Some Mother’s. En Hotel Rwanda presentado en la selección oficial en el Festival de Berlín, se interroga sobre la indiferencia mundial ante el genocidio ruandés, a través de la auténtica historia de Paul Rusesabagina.

¿Como descubrió esta historia?

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

Las guerras y conflictos en África me interesaban pero son temas que Hollywood tenía tendencia a evitar cuando yo trabajaba. Y luego, recibí la historia de Paul. Sentí que además de contener todos los elementos sobre los conflictos, el racismo, etc, este relato tenía también los ingredientes indispensables para hacer una buena película. Incluso retirando el contexto del genocidio que se desarrolla fuera del hotel de Mille Collines, seguía siendo aún un thriller y un espléndido romance. Cuando me he entrevistado con Paul y su mujer Tatiana, experimenté cuánto formaban un equipo. Se convirtieron en el corazón de la película ya que, aunque se trata de un tema político, se debe conservar una parte de entretenimiento. Es muy importante para poder sensibilizar a la gente sobre un tema tan grave como el genocidio.

¿Cuándo comenzó su interés por África?
Al observar la evolución de las guerras allí y la manera en que Occidente intervenía tuve deseos de escribir un guión sobre Liberia. Pero al descubrir la historia de Paul, descubrí un mensaje aún más fuerte. En medio de uno de los mayores cataclismos del siglo XX, un hombre tiene el valor de levantarse y actuar mientras que todos optamos por la ignorancia. Es la clase de historias que me gusta contar en su forma más pura. Se puede llevar a los espectadores al centro del acontecimiento, no solamente para mostrarles el horror, sino para que se compadezcan con estos otros humanos. Es algo que no se puede alcanzar de la misma manera con un documental o un reportaje.

¿Cuál ha sido la dificultad mayor de esta película?
¡Reunir el dinero! Es la cosa más extraña de este proyecto: escribir el guión y hacer la película eran las etapas más fáciles. Por el contrario, el más complicado fue encontrar la financiación y convencer a los distribuidores. En primer lugar intenté encontrar el dinero en Hollywood pero no lo logré. Por último, con mi socio Alex Ho, decidimos utilizar los caminos del cine independiente. Encontramos el dinero en Sudáfrica, Inglaterra e Italia. Pero incluso así, dos días después del inicio del rodaje, no teníamos aún el dinero necesario… Alex y yo financiamos la pre-producción. Fue muy angustiante. Afortunadamente, la intensidad y la importancia del tema nos ayudaron a reunir el equipo y a los actores. Estaban muy motivados y pasamos momentos formidables en el rodaje en Johannesburgo.

A pesar de todo eligieron protagonistas americanos.
Hay varias razones para eso. Hay que ser realistas ante la taquilla y con las oportunidades que se dan a la película para que sea vista. Para mi, hacer cine es comunicar y en consecuencia hacia el más amplio público posible. Con protagonistas como Don Cheadle y Sophie Okonedo, sentía que se respetaba la integridad del proyecto. Don desaparece bajo el personaje, se convierte en Paul. Pasa lo mismo con Sophie: si ve Dirty Pretty Things y después Hotel Rwanda, se tendrá dificultad a reconocerla. Y es de eso que yo tenía necesidad. En cuanto a Joaquin Phoenix, aceptó el rol por amistad, sin salario. Jean Reno también por otra parte. Pero se tiene también un casting africano extraordinario, sin contar con todos estos niños ruandeses.

¿ Paul Rusesabagina fue solicitado por otros realizadores, cómo lo convenció de confiarle su historia?.
Le mostré In the Name of the Father, The Boxer ySome Mother’s Son para que comprenda la naturaleza de mis películas. Paul es alguien muy inteligente. Sabía que su historia tendría más impacto en forma de largometraje de ficción. Y Hotel Rwanda es también una tribuna que pone de relieve los acontecimientos actuales en Darfour y en al Congo.

Propósitos recogidos en el Festival de Berlín

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Lee también

Privacy Policy