26/03/2007

"Uno mira, el otro se deja mirar". Las cosas empiezan a ponerse especialmente interesantes cuando Anne Wild habla sobre su trabajo con los actores, ya que la directora empezó su propia carrera en esta profesión siendo actriz. Durante este tiempo, realmente, tenía muy claro que quería tomar un camino diferente: "Ya entonces, dirigía y producía a mis colegas"; por eso no puede sentir menos que un enorme respeto hacia esta profesión. "Confianza mutua" es lo más importante, dice. Hoy, ella misma selecciona sus actores y actrices: "Vi a Juliane Koehler en una producción de Stella, y después me puse en contacto con ella para el papel principal en My First Miracle". También tenía en mente elegir a Sybille Canonica para el papel de bruja, en su versión cinematográfica del cuento de hadas de los hermanos Grimm Hansel and Gretel. "Quería una mujer alta, oscura y no una abuelita marchita y vieja."

Hasta ahora, la directora de 39 años se ha forjado un puesto destacado en el mundo del cine, gracias a dos películas. En 2001 escribió el guión para ¿Qué hacer en caso de incendio?, una película que combina el retrato de la generación de finales de los setenta con motivos de cine de género, rodada por Georg Schnitzler. Luego vino su propio debut como directora, My First Miracle. Con esta arriesgada historia sobre la intensa amistad entre una niña de 11 años y un adulto, Wild ganó el aclamado Max Ophuels Prize en 2003. "Por supuesto, en el fondo es un tema parecido", dijo Wild al echar la mirada atrás y hablar de estos dos películas diferentes. "En los dos casos, se trata de crecer."

Pasó bastante tiempo antes de que Wild se convirtiese en directora. A diferencia de muchos de sus colegas, nunca fue a la escuela de cine. Tras la escuela de arte dramático, trabajó en diferentes ámbitos: como periodista, redactora de anuncios y asistente de producción. Luego llegó el gran salto con ¿Qué hacer en caso de incendio?. "Era mi primer gran guión, lo que significaba que no podía ser yo quien la rodase en aquel momento. Pero después de esto, todo sucedió automáticamente" y se abrieron las puertas para una película propia.

My First Miracle fue también un milagro cinematográfico menor: lleno de poesía y una densa atmósfera, pero sin caer en lo sentimental, Wild cuenta un amor imposible – y rompe con los tabúes. Lejos de todos los clichés narrativos sobre adolescentes y abuso de niños, la película aborda la relación entre un niño y un adulto, y muestra un breve interludio, lejos de los valores y las normas burguesas, un tiempo para soñar despierto y evadirse del mundo. Como siempre, Anne Wild tenía una confianza absoluta en que la obra seduciría: "Estaba segura de que iba a funcionar". Una película fantástica, realizada con medios modestos, que más tarde se distribuiría en 17 salas alemanas, logrando un éxito razonable: "El distribuidor no perdió – eso es lo importante para mí."

Continuó en 2005 con Hansel and Gretel: "Un versión cinematográfica del cuento de hadas de Grimm que se mantiene absolutamente fiel al original." Wild no quería modernizarlo, porque después de todo, trata sobre el miedo, el subconsciente y los arquetipos – "esto es lo interesante de los cuentos de hadas." Después de su proyección en la Berlinale 2006, la película llegará a los cines alemanes a lo largo del 2007.

En este momento, Wild está trabajando paralelamente en el desarrollo de tres ideas. Un proyecto se centra de nuevo en los jóvenes, otro es una historia familiar, y el tercer guión "es una historia de amor, con varias mujeres y un hombre".

Para Wild, el proceso de escritura de un guión es complicado y muy exigente en términos de tiempo, además, también echa de menos algunas veces el intercambio con otros escritores. Pero, como ella misma afirma: "Es así como hago las cosas y no puedo hacerlas de otra manera."