02/04/2008

Nae Caranfil fue en muchos sentidos el único director que hondeó la bandera de la esperanza del cine rumano en los años 90, con varios éxitos a sus espaldas (Don’t Lean Out the Window, Asphalt Tango, Sweet Idleness y Philanthropy). Caranfil estrena por fin la película con la que lleva soñando 20 años, The Rest Is Silence [+lee también:
tráiler
ficha de la película], que explica la historia de cómo se rodó la primera película rumana, básicamente basándose en un trabajo de cinemática que muestra la madurez de un joven artista. Un poco como era Caranfil en 1988, cuando escribió el guión.

Cineuropa: ¿Cuál es tu relación con el productor Cristian Comeaga y cuánto se parece al joven Gris, el director de su historia?
Nae Caranfil: Al principio, cuando escribimos este guión, Cristian no podía ni siquiera sonar en llegar a ser un día productor de cine. Corría el año 1988 y los productores tenían buenos contactos en el Ministerio de Cultura. He intentado mostrar la relación que se crea entre un productor y un director, entre el economista y el artista, entre dinero y arte. Es una relación apasionada, que incluye amor y odio, y creo que esto es lo que hace realmente interesante esta película.

¿Porque crees que, a pesar de tus esfuerzos, la película no ha tenido la resonancia esperada en los festivales?
Los festivales son una cosa completamente distinta. No van dirigidos al público en general, sino que tienen una audiencia muy limitada. Los festivales tienen esta estrategia, promueven películas que no tienen una audiencia definida. Sean buenas o malas, deben ser incomprensibles para el público. Sólo puede ser buena o mala una película si la productora es buena o mala. No es algo completamente jerárquico lo que hace que una película tenga “arte cinematográfico”. Las películas de Chaplin son las películas más accesibles al público que se han hecho nunca y son obras maestras del cine.

Pienso que lo que está pasando hoy en día en los festivales no es nada bueno. Tenemos que enfrentarnos a una “cortina de hierro” entro lo que ellos llaman “público general” y las “estrategias de festival”. El cine europeo, y el cine americano no se comunican entre ellos, como pasaba en los años 70, y ésa es la razón por la que las películas de Hollywood son cada vez más estúpidas y las europeas cada vez más complicadas.

¿Crees que la película tendrá una distribución internacional ?
Las distribuidoras internacionales son una cosa totalmente distinta a los actores, directores y productores. Invierten su propio dinero, no reciben subvenciones y no invierten el dinero de otros. Es por ello que tienen miedo a dar oportunidades. El miedo al riesgo es superior a todo lo demás. Les gustaría poder vender la misma película de éxito una y otra vez. Y The Rest is Silence no es una película corriente que se venda fácilmente, así que vamos a necesitar una distribuidora valiente y creativa. Y espero encontrarla.