2012 será la fecha límite para conseguir una distribución digital en todo el territorio
por Boyd van Hoeij
Varias organizaciones de la industria cinematográfica neerlandesa anunciaron conjuntamente en julio la unión de sus fuerzas para coordinar y acelerar la digitalización de los procesos actualmente analógicos de distribución y proyección.
La nueva entidad supervisora, CinemaDigitaal.nl, fue fundada por la NVB (la organización de exhibidoras neerlandesas), la NVF (su homóloga en la distribución) y el instituto nacional de cine: EYE Film Institute.
El país tiene una gran red de cines de la que forman parte las numerosísimas salas pequeñas de arte y ensayo distribuidas por las diferentes provincias del territorio. En aras a favorecer la conversión de la proyección y la distribución analógicas al formato digital, CinemaDigitaal.nl administrará el proceso en todo el país y se responsabilizará, entre otras cosas, de la adquisición del equipamiento necesario.
Este enfoque a nivel nacional es único en Europa: los exhibidores y distribuidores del resto de países del continente suelen trabarse con problemas y debates sobre la coordinación y sobre los costes de la digitalización, pues es evidente que una de las partes sale más beneficiada que otra.
En el caso de los Países Bajos, está previsto que el presupuesto para la digitalización ronde los 39 millones de euros, de los cuales 6 provendrán de las arcas del estado. El resto saldrá de los bolsillos de las empresas que forman parte de las organizaciones que fundaron CinemaDigitaal.nl.
«Las salas de proyección más pequeñas, los cines independientes y las distribuidoras a pequeña escala de cine de autor corren el riesgo de quedar fuera de las mejoras digitales», dijo el EYE Film Institute en un comunicado de prensa. «Son precisamente estas mejoras las que ofrecen la posibilidad de un crecimiento y una mayor diversidad en el ámbito de la distribución y de la exhibición».
La distribución digital y las oportunidades que se abren a la proyección de películas deberían facilitar y acelerar en todas las salas de los Países Bajos: las proyecciones de carácter aislado, como óperas, representaciones teatrales y acontecimientos deportivos; un mayor aprovechamiento de las películas rodadas en 3D, y el acceso a cintas más antiguas y experimentales a partir de los archivos cuyo contenido ya ha comenzado a digitalizarse.
(Traducción del inglés)
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