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INSTITUCIONES Bélgica

Balance de 2010 del CCA

por 

Como cada año, la ministra de Cultura y del Audiovisual belga, Fadila Laanan, el secretario general de la comunidad francesa de Bélgica y el director del Centro del Cine y del Audiovisual, Frédéric Delcor, y los presidentes de las diferentes secciones de la Comisión de selección de películas invitaron a los profesionales belgas a una reunión con el fin de presentar y evaluar las acciones realizadas durante el año pasado. Esta cita constituyó la ocasión para comunicar algunas cifras halagüeñas, comenzando por la subida de un 25% de las entradas vendidas por producciones belgas francófonas mayoritarias para un total de 400.000. Se trata de una buena noticia ya que la difusión del cine belga francófono fue precisamente una de las mayores preocupaciones este año. El CCA, que intenta dar visibilidad a esta producción, trabajó así sobre varios ejes estratégicos, modificando las ayudas concedidas a la promoción y a la difusión y asociándose con los profesionales para la creación de los premios Magritte.

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El CCA también realizó un estudio exhaustivo de las fuentes de financiación para la producción. De los 28 largometrajes subvencionados en 2010, por un valor total de 176 millones de euros, cerca del 30% de los fondos, es decir 53 millones, provienen de Bélgica (93 millones de Francia). Dentro de la parte belga, el 33 % proviene del Tax Shelter, un 21% del CCA, 14.3% de las ventas internacionales, un 11% de Wallimage… Estas cifras ilustran la complementariedad de las diferentes ayudas disponibles en la Bélgica francófona, así como la atractiva imagen de Bélgica como plataforma de coproducción a escala europea. Cabe destacar, por otra parte, un aumento de las coproducciones con Alemania, que se está convirtiendo poco a poco en un socio cada vez más habitual. Se espera que esta tendencia siga creciendo gracias a nuevos intercambios sobre la base del acuerdo bilateral de coproducción entre Alemania y Bélgica.

Gracias a un mayor prestigio, al aumento del número de espectadores y al interés internacional que ha despertado, el cine de la Bélgica francófona goza de buena salud.

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(Traducción del francés)

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