07/11/2011

La hispano-argentina Un cuento chino [+lee también:
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ficha de la película], de Sebastián Boresztein, ha coronado el pasado viernes un año excepcional con los premios a la mejor película tanto del jurado como del público del Festival Internacional de Cine de Roma. Doce meses en los cuales se ha metido en el bolsillo al público argentino y español y ha sentado las bases para llegar a otros muchos países en los próximos meses. Un éxito que, según su agente de ventas, la española Latido Films, se basa en “la empatía de los personajes, que representan un problema de comunicación que ahora mismo es muy común debido a la creciente migración”.

A pesar de que es una obra totalmente argentina desde el punto de vista, Un cuento chino es una producción mayoritaria española (60%) a través de Castafiore Films, Tornasol Films y Aliwood Mediterráneo Producciones. Nada extraño ver a las dos primeras, de Gerardo Herrero, en una coproducción con Argentina, un país con el cual el productor mantiene una relación muy estrecha (su tercera productora, cuyo nombre se inspira igualmente en el mundo de Tintín, Haddock Films, está en Buenos Aires), que ha dado lugar a una larga serie de colaboraciones, entre las cuales destaca El secreto de sus ojos [+lee también:
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entrevista: The Secret in Their Eyes
entrevista: The Secret in Their Eyes
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ficha de la película], de Juan José Campanella, ganadora del Oscar a la mejor película de habla no inglesa en 2010.

El recorrido comercial de Un cuento chino arrancó en marzo en Argentina de una manera espectacular, donde se ha convertido en el título nacional más visto del año, con casi un millón de espectadores. Allí empezó a hacerse notar por su capacidad para generar un muy positivo efecto de boca-oreja entre el público, lo cual se ha repetido en su lanzamiento en España en junio (ha multiplicado por 5,6 la recaudación de su primer fin de semana - 400.000 euros- hasta un total de 2,24 millones).

Esta gran popularidad ha sido sin duda una de las claves de que haya sido adquirida en multitud de territorios, como Austria, Francia, Alemania, Italia y Suiza en Europa, así como Australia, Nueva Zelanda y numerosos países de Latinoamérica.