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INDUSTRIA Francia

Michel Hazanavicius argumenta su postura sobre la experimentación y la cronología de medios

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- El presidente de la ARP responde a la preocupación de las otras asociaciones de productores en relación a los experimentos con estrenos "day-and-date"

Los próximos experimentos de estrenos "day-and-date" de películas en Europa (leer más) siguen preocupando a la industria cinematográfica francesa. El oscarizado director Michel Hazanavicius (foto), presidente de la ARP, entidad que reúne a guionistas, directores y productores de Francia y que está involucrada en la propuesta experimental de la Comisión Europea, respondió ayer a las inquietudes (leer más) del SPI (sindicato de productores independientes) y de la UPF (unión de productores de cine). A continuación figuran los fragmentos más destacados de la intervención de Hazanavicius:

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"Con esta acción nos mantenemos fieles a la defensa del interés general del cine francés y del cine europeo, una mejor difusión de sus películas y la anticipación permanente de nuevos modelos económicos en nuestro sector, en aras a preservar una regulación sana para la producción independiente.

Nos pareció perfectamente legítimo participar en este proceso político que no debe dejarnos de lado. No se trata de abrir la caja de Pandora, sino de reflexionar sobre las opciones presentes (…) Francia siempre ha sido precursora en las políticas cinematográficas; siempre ha sabido integrar los nuevos medios de comunicación dentro de la cronología, otorgándoles derechos y obligaciones. Los nuevos participantes no tienen por qué ser nuestros enemigos; nuestro deber es reflexionar sobre una política de integración en armonía, de manera responsable y no conservadora.

Hoy en día, el video a la carta (VOD) debe considerarse dentro del proceso, y debemos hacerlo, sin duda, con más imaginación y algo menos de aprehensión. Es un medio único de difusión del cine y también constituye una oportunidad inocua de proyección de películas".

Esto no quiere decir, como es natural, que queremos cuestionar la cronología de medios o poner en peligro la sala, que debe seguir siendo la primera destinación de nuestras películas. No obstante, algunas obras no cuentan con las armas necesarias para soportar el tajo fatídico que otros trabajos les brindan cada semana. Estas películas frágiles, a menudo sin una buena financiación, que se estrenan en pocas copias, no pueden sufrir sistemáticamente esta pena doble. Estas obras son esenciales para la diversidad de nuestros cines y de nuestra producción. No nos parece ilegítimo o difamatorio pensar en otra manera de exhibir cine, consistente en mantener la sala como centro neurálgico de esta exposición sin dejar de emplear el VOD como alternativa de difusión. ¿Cómo permitir que obras que no cuentan con la participación de las televisiones puedan circular en Europa? ¿Cómo conseguir que el público al que no suelen llegar puedan dar con ellas? Las fuentes de financiación no tienen motivos para preocuparse, ya que nunca se interesaron por ello."

"Encontramos estimulante que casi todos nuestros colegas quieran disuadirnos de que perseveremos con esta idea. Nos plantea preguntas y alimenta nuestra reflexión. Una vez más, estos experimentos no nos servirán hoy más que para pensar en los movimientos del futuro. Sin embargo, nosotros no tenemos miedo al movimiento, precisamente porque somos cineastas. Si lo tuviéramos, seríamos fotógrafos".

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(Traducción del francés)

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