17/12/2012 - El festival de cine europeo ofrece un ecléctico panorama del cine belga, con obras a cargo de autores como Jaco Van Dormael, Koen Mortier, los Dardenne, Erik Van Looy, Joachim Lafosse o Bouli Lanners

Después de Hungría, Dinamarca e Italia, el festival de cine europeo de Les Arcs ha escogido a Bélgica como país huésped este año. Además de las dos producciones belgas seleccionadas a concurso (Kinshasa Kids [+lee también:
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entrevista: Marc-Henri Wajnberg
ficha de la película], de Marc-Henri Wajnberg, y La Cinquième Saison, de Brosens y Woodworth), y del estreno de Dead Man Talking [+lee también:
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ficha de la película], de Patrick Ridremont (foto), el festival ha programado 14 largometrajes y 6 cortos para ofrecer una panorámica de la locura creativa con que el cine belga viene deleitándonos desde hace más de veinte años. El viaje empieza en 1988 con Picpic et André, primera aventura de Patar y Aubier, y concluye su recorrido con las producciones del año pasado Los gigantes [+lee también:
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entrevista: Bouli Lanners
ficha de la película], de Bouli Lanners, y La Fée [+lee también:
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entrevista: Dominique Abel, Fiona Gordon
ficha de la película], de Dominique Abel y Fiona Gordon.

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La parrilla da buena cuenta, como es lógico, tanto de la producción de la región flamenca como de Valonia. Así, el público francés podrá disfrutar del éxito de 2003 De Zaak Alzheimer [+lee también:
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ficha de la película], de un Erik Van Looy (que en 2008 dirigió Loft [+lee también:
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ficha de la película], aún hoy record de la historia de la taquilla en Bélgica) que puso en órbita toda una generación de jóvenes cineastas flamencos que trataron temas que van desde el relato social (Moscow Belgium [+lee también:
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ficha de la película], de Christophe Van Rompaey) al cine policiaco más paranoico (Pulsar [+lee también:
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ficha de la película], de Alex Stockman), pasando por el panfleto cínico (Ex-Drummer [+lee también:
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ficha de la película], de Koen Mortier). En cuanto a la parte francófona, vamos un poco más lejos hasta llegar al magistral ensayo de Jaco Van Dormael de Toto, el héroe, ganador de la cámara de oro en 1991, y a la primera participación de los Dardenne en Cannes, con La promesa, en 1996. La nueva generación de cineastas de la última década gozó del reconocimiento tanto nacional e internacional a raíz de directores como Bouli Lanners (Los gigantes), Joachim Lafosse (Elève Libre [+lee también:
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entrevista: Jacques-Henri Bronckart
entrevista: Joachim Lafosse
ficha de la película]), un habitual de Cannes, o Frédéric Fonteyne, seleccionado recientemente en Venecia. 

De manera paralela a esta retrospectiva se abordará el futuro del cine belga en el marco del Village des Coproductions, en el que participan cinco proyectos de este país, tres de ellos óperas primas: Le Bénéfice du Doute, de Samuel Tilman (Eklektik Productions); Rabbits, de Jean-Julien Colette (Hélicotronc), y Paradise Trips, de Raf Reyntjens (Caviar Film).

(Traducción del francés)