18/07/2013 - La distribuidora alemana Concorde Film solo distribuirá DCP a los cines a partir de agosto

El cine, tal y como lo conocemos, llega a su fin. Los estudios de Hollywood ya anunciaron que ya no habría copias en 35 mm a finales de 2013. Por ese motivo, muchos cines han optado por una conversión digital. En Alemania, la distribuidora, con sede en Múnich, Concorde Film ha informado a los proyeccionistas que el drama romántico de inspiración fantástica Upside Down [+lee también:
tráiler
making of
ficha de la película],de Juan Diego Solanas (foto), que Concorde estrenará el 22 de agosto, marcará un punto de inflexión. A partir de ese día, la distribuidora alemana solo facilitará a los cines películas en DCP (digital cinema packages).

Eso significa que esta distribuidora alemana abandonará la distribución híbrida incluso antes que las grandes empresas estadounidenses. La última película que Paramount Pictures facilitará en 35 mm y en copias digitales es el thriller de terror Paranormal Activity 2013, que se estrenará el 24 de octubre en Alemania. En lo que respecta al estreno navideño de otro thriller,  Jack Ryan, solo estarán disponibles copias en DCP. La película de aventuras de Disney The Lone Ranger también se estrenará en DCP solamente, mientras que las películas de entretenimiento Planes y Frozen sí que estarán disponibles en 35 mm también.

La asociación alemana de proyeccionistas Hauptverband Deutscher Filmtheater ha comenzado una solicitud de estado (Kopienhandhabung) para saber hasta cuándo las distribuidoras seguirán estrenando de forma híbrida en Alemania. Mientras tanto, alrededor del 75 % de todos los cines alemanes ya se han digitalizado. Para el 25 % restante, la conversión digital supone una inversión económica que los fondos públicos del cine no tienen por qué cubrir. Por este motivo, el Medienboard Berlin-Brandenburg ha relajado los requisitos para obtener ayuda en la digitalización, para que así los cines pequeños de la región puedan financiar sistemas de proyección digital más fácilmente. A partir de ahora, las salas de Berlín podrán pedir que se les financie hasta el 50 % de los costes derivados de la digitalización, incluso aquellos que no tengan 8.000 entradas por proyección o unas ventas netas de 25.000 € al año.

(Traducción del inglés)