20/08/2013 - Este documental de Marc Bauder aborda la actual crisis financiera a través de una entrevista al genio de las finanzas Rainer Voss, ya jubilado

El último documental de Marc Bauder, Master of the Universe (foto), es una sobrecogedora y penetrativa entrevista con Rainer Voss, antiguo empleado de un banco de inversión que habla de la enfermedad del sistema desde una torre de oficinas vacía del distrito financiero de Frankfurt.

Esta producción de Bauderfilm y la austriaca NGF Geyrhalter Film (dirigida por el maestro del documental Nikolaus Geyrhalter), celebró su estreno en el festival de cine de Locarno, donde se alzo con el premio de la Semana de la Crítica, al que acompañan 8 000 francos suizos.

Antes de convertirse en el “hombre independiente” que es ahora, Voss ganó más de 100 000 euros al mes cuando trabajaba en el mundo financiero y obtuvo beneficios para su superior (al que no se nombra) de varios millones al día. Aquí revela cómo tener sexo ocasional en la oficina era lo habitual para escalar en la profesión. “Básicamente, uno tenía que estar dispuesto a renunciar a su vida”, afirma Voss. 

El entrevistado habla en profundidad de la insana cultura del mundo bancario de sacar provecho, interesado únicamente en conseguir siempre un 10 % más que lo obtenido el curso anterior. Se dice a los empleados que al jefe “no le importa cómo lo hagáis” y que la especulación con las economías de países enteros, como Grecia o Portugal, se considera juego limpio.

Aunque Voss también aborda su carencia de vida privada y parece lamentar (aunque no emplea exactamente estas palabras) no haber pasado más tiempo con sus hijos, queda claro que es, ante todo, un genio de las finanzas, capaz de explicar conceptos bancarios complejos en términos perfectamente comprensibles. Bauder le permite incluso apoyarse en las ventanas de la oficina espantosamente vacía para escribir sus fórmulas y explicaciones. 

“Los bancos tienen un plan B para todo; sin embargo, para esta crisis financiera, no hay plan B”, declara Voss cerca del final de la cinta, antes de afirmar que “hay tanto dinero en circulación [en la industria financiera] que podrían comprarse países enteros en un abrir y cerrar de ojos”; y concluye: “No va a haber un final feliz a todo esto, de ningún modo”.

Aunque el documental no revela nada nuevo, ver esta realidad tan bien explicada por alguien que estaba en el ajo no deja de ser una experiencia que pone los pelos de punta, sensación que incrementa el despacho vacío que sirvió de escenario de la entrevista.  

(Traducción del inglés)