24/07/2014 - El director del festival de Venecia, Alberto Barbera, promete grandes autores, títulos muy esperados, directores emergentes y cine de países aún por descubrir

Grandes maestros, esperadísimas películas, jóvenes promesas y títulos provenientes de países inexplorados. La Mostra internacional de cine de Venecia vuelve con la 71ª edición entre los días 27 de agosto y 6 de septiembre y un programa que, como ha reivindicado con fuerza su director artístico, Alberto Barbera, hoy en su presentación en Roma, “se atreve a apostar y a asumir riesgos, invertir en jóvenes con el Biennale College, dar visibilidad a las películas también a través de la 'sala web', aceptando los desafíos de la edad contemporánea". Pocas estrellas norteamericanas y muchos títulos europeos de calidad en una parrilla en la que participan, por primera vez, nada menos que 40 países. En primer lugar, dos películas esperadísimas sobre dos de los poetas italianos más destacados de la historia: Pasolini, coproducción franco-belga dirigida por Abel Ferrara, e Il giovane favoloso, dedicada a Giacomo Leopardi y dirigida por Mario Martone. 

Entre las veinte seleccionadas en competición, destaca el regreso de Fatih Akin con The Cut [+lee también:
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entrevista: Fatih Akin
entrevista: Tahar Rahim
ficha de la película], sobre el genocidio armenio; A Pigeon Sat on a Branch Reflecting on Existence [+lee también:
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entrevista: Roy Andersson
ficha de la película], del sueco Roy Andersson, un habitual del festival de Cannes y "una de las sorpresas de la Mostra", asegura Barbera. También encontramos a Xavier Beauvois con La Rançon de la gloire, protagonizada por Benoit Poelvoorde y Chiara Mastroianni, quienes también actúan en 3 Coeurs, de Benoit Jacquot. Francia también estará representada por David Oelhoffen, que presentará Loin des hommes con Viggo Mortensen, y Alix Delaporte, que acudirá al Lido con Le dernier coup de marteau.

El segundo film italiano en competición es Anime nere, de Francesco Munzi, mientras que Saverio Costanzo firma Hungry Hearts, rodada en Nueva York con un presupuesto bajo y apenas dos actores: Adam Driver y Alba Rohrwacher. 

Al cabo de muchos años, este año regresará a la Mostra Andrei Konchalovsky con The Postman's White Nights. Por otra parte, es una coproducción paneuropea el único documental “in concorso”: The Look of Silence, de Joshua Oppenheimer.

Fuera de competición el programa es rico en nombres de calidad: Amos Gitai con Tsili, Manoel de Oliveira (de 105 años de edad) con The Old Man of Belem, Ulrich Seidl con In the Basement, en la que explora los comedores de Viena y Austria con resultados que, palabra de director, "provocarán sonrisas y sobrecogimiento al mismo tiempo". La única película de animación es la británica The Boxtrolls, de Anthony Stacchi y Graham Annable, mientras que Sabina Guzzanti presentará, tras una larga labor, La trattativa, sobre toda una serie de vicisitudes históricas en las que se vieron involucrados la mafia y grandes personalidades del Estado. El documental de Davide Ferrario La zuppa del demonio utiliza imágenes de archivo para ilustrar los sueños de industrialización de la Italia del pasado, lo que constituye el contrapeso de la obra con que participa Gabriele Salvatores: Italy in a Day, un genial format ideado por Ridley Scott hace algunos años. Por último, estará en el Lido el italiano Edoardo De Angelis con Perez. 

(Traducción del italiano)