16/06/2015 - El nuevo director artístico de la Festa del Cinema ha adelantado algunos detalles de la décima edición del evento: una selección concreta, retrospectivas y encuentros con grandes nombres del cine mundial

Una selección de entre 30 y 35 películas en estreno europeo, un par de retrospectivas y una serie de encuentros con protagonistas del cine mundial son los tres ejes que se corresponden con las apuestas de la próxima Festa del cinema di Roma: discontinuidad, calidad y variedad. Entre los próximos 16 y 24 de octubre, la décima edición del festival de cine de la capital italiana se celebrará siguiendo estas consignas de su nuevo director artístico, Antonio Monda. “En una fiesta no hace falta dar premios”, recordó Monda; “por eso sólo quedará el del público”. No más secciones más allá de Alice nella città, dedicada a los más jóvenes. Las películas presentadas (está prevista también algún estreno mundial) cubrirán ficción, documentales y animación e irán desde el mainstream hollywoodiense hasta el cine de autor, sin dejar de prestar atención a las series de televisión. La selección se anunciará el 29 de septiembre. 

Se consagrará una retrospectiva a Antonio Pietrangeli y otra a un gran autor internacional cuyo nombre aún no se ha desvelado. Animarán la Festa del cinema di Roma (cuyo presupuesto asciende a 3,6 millones de euros) sobre todo sus encuentros: al menos uno al día, con personalidades que hablarán sobre su cine y su cinefilia. “Creo en la dimensión de los encuentros porque constituye un gran trabajo de formación y crean público más que cualquier otra cosa”, subraya Monda, respaldado por Piera Detassis, presidente de la Fundación Cinema per Roma, para quien “El encuentro cercano con el público será el rasgo distintivo de Roma”. Así, entre muchos otros, Joel Coen hablará junto con su mujer, Frances McDormand, de asociaciones de pareja; Wes Anderson y la escritora ganadora del Pulitzer Donna Tartt se confrontarán para tratar el cine italiano que más les gusta; Carlo Verdone y Paola Cortellesi protagonizarán una velada sobre la comedia; William Friedkin se reunirá con su escritor italiano con vida preferido (su nombre permanece en secreto); Paolo Sorrentino presentará el estreno mundial de una obra inédita de diez minutos, y Renzo Piano hablará de la relación entre el cine y la arquitectura. 

Entre los eventos especiales también figura un homenaje a Pier Paolo Pasolini con motivo de los 40 años de su muerte. Monda, además, ha pedido a cada uno de los miembros del comité de selección que escojan una película que aprecien especialmente para volver a presentarla ante el público: “serán seis. La mía es El último magnate, de Elia Kazan”, ha desvelado. No faltará a la cita el cine italiano, si bien se elegirán películas basándose exclusivamente en la calidad, no para rellenar una sección: “detesto toda idea de cuota”, ha precisado el director; “la mejor manera de ayudar a nuestro cine es tomar sólo películas buenas”.

Por ahora, las últimas novedades de este año son: la red de salas, que se esparcirá a lo largo y ancho de la ciudad para las réplicas de las películas (“tendremos la oportunidad de usar también algunos de los 42 cines cerrados en las últimas décadas”, ha asegurado el alcalde de Roma, Ignazio Marino), y el lugar en que se celebrará el mercado internacional del audiovisual, MIA (leer más), que albergarán las Termas de Diocleciano (“un enclave sin parangón en el mundo”, según el ministro de cultura italiano, Dario Franceschini, “lo cual también es importante”).

(Traducción del italiano)