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PELÍCULAS Bélgica / Países Bajos

Mi primer viaje: "Rebelde sin idea”

por 

- El director belga Kevin Meul explora el típico drama social de un jovencito que ve cómo su mundo se viene abajo después de haber cometido un acto irreversible

Mi primer viaje: "Rebelde sin idea”
Aaron Roggeman en Mi primer viaje

En su ópera prima, Mi primer viaje [+lee también:
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ficha de la película
]
, el director belga Kevin Meul se centra en la historia del Benjamin (Aaron Roggeman) de 16 años. De vacaciones en un camping de caravanas en España con sus padres y su hermano pequeño, este adolescente apático vaga sin rumbo por la vida. Ni guapo ni particularmente encantador y con una apatía que es verdaderamente deprimente, parece que no tiene pasión ni personalidad, ya que siempre ha ido con la corriente sin cuestionarse nada y sin tomar la más mínima iniciativa.  La mediocridad de Benjamin es representativa de nuestro tiempo, donde los adolescentes rebeldes de años atrás han dado paso a aspirantes cínicos y mimados. El famoso “Rebelde sin causa” interpretado por James Dean, ahora es más un “Rebelde sin idea”. 

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Esto es hasta el día en el que Benjamin, sin entender por qué, es seducido por Annabel (Romy Louise Lauwers), una guapa chica belga que tiene su misma edad, que vive por la zona, y que está tan aburrida como él en su trabajo de verano donde ayuda a su madre en su tienda de ultramarinos. De ojos saltones, esbelta y con las piernas de una estrella de Hollywood, esta chica coqueta e intrigante se ha dado cuenta del poder que tiene en los chicos, pero también de los peligros que esto entraña. De hecho, días antes de conocer a Benjamin, Annabel es violada. Demasiado avergonzada para ir a la policía, se lo confía a Benjamin. Los dos piensan que son unos perdedores aunque solo tienen 16 años. Compañeros de fechorías, se despendolan juntos: beben, bailan, conducen a toda velocidad, borrachos la volante… pero su despreocupación (rozando el nihilismo) es efímera. Benjamin, completamente enamorado, no tiene ni idea del desastre al que Annabel lo está llevando. Una noche, con falsos pretextos, le fuerza a allanar la casa de su violador armado con una pistola. Un tiro se dispara por accidente. El hombre cae al suelo. Presos del pánico, Annabel y Benjamin huyen… Al día siguiente, Annabel decide que sería buena idea que no se vieran más.

Producida por Fobic Films (Bélgica) y CTM Pictures (Países Bajos) con las ventas internacionales a cargo de Premium Films, la película explora el típico drama social de un jovencito perdido, sin la menor pizca de moral ni inteligencia, que ve cómo el mundo se viene abajo después de haber cometido un acto irreversible. Esta “ducha fría” metafórica enseña a Benjamin que esta actitud despreocupada es su peor enemiga, pero también descubre en él una humanidad, lo que habría sido inconcebible hasta ahora. Claramente influenciado por el cine de los hermanos Dardenne (dejando a un lado el paisaje soleado), de los que trata algunos temas, Meul multiplica el número de escenas de su película que de otra manera serían anodinas al crear un ambiente tenso con la sensación de que algo puede ir mal en cualquier momento. El director se salta la investigación policial, quitando toda clase de suspense, para centrarse completamente en la historia de “madurez” y en el dilema moral de Benjamin de si se tendría que entregar a la policía a o no…Lo que es una pena porque habría sido interesante ver como la red se estrecha alrededor de Benjamin y/o Annabel.

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En colaboración con

 

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(Traducción del francés)

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