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SAN SEBASTIÁN 2017 Nuev@s Director@s

Cargo: un vasto abismo comunicativo

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- SAN SEBASTIÁN 2017: El debutante belga Gilles Coulier firma un drama sólido, sutil y ambientado en un paisaje inclemente que explora los márgenes de la alienación intrafamiliar

Cargo: un vasto abismo comunicativo
Sam Louwyck en Cargo

El director, guionista y productor belga Gilles Coulier proyectó en Cannes dos de sus cortometrajes: Iceland (2009) en Cinéfondation y Mont Blanc (2013) en la competición oficial. En 2014, se centró en la televisión, siendo uno de los creadores y coproductores de la serie cómica The Natives (2015), que tuvo una buena acogida. Más tarde, el cineasta comenzó a desarrollar su primer largometraje, Cargo [+lee también:
tráiler
entrevista: Gilles Coulier
ficha de la película
]
, que compite en la sección Nuev@s Director@s del 65º Festival de San Sebastián.

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Ambientada en la ciudad costera de Ostende, en el oeste de Flandes, la cinta cuenta las dificultades a las que se enfrentan los hermanos Broucke desde que su padre, Leon (Roland Van Campenhout), cayera de su barco pesquero al agua durante una tormenta. El hijo mayor, Jean (Sam Louwyck), único testigo de la caída, tiene que afrontar el coma profundo de su padre, la enorme deuda que tiene la familia y el negocio de pesca y el futuro de su hijo de ocho años. Su hermano menor, Francis (Wim Willaert), trata de encontrar un equilibrio entre sus deberes familiares y su pasión personal, y prepara una fuga con su amante secreta. Cuando la oveja negra de la familia, William (Sebastien Dewaele), vuelve a casa en busca de redención, las relaciones entre los hermanos se complicarán todavía más y la falta de comunicación será más notoria de que nunca.

Cargo es un drama familiar sustentado por los personajes que aspira al realismo a través de una forma sutil y directa de narración. Coulier, que coescribió el guion junto a Tom Dupont, crea personajes que cargan con bagajes que parecen no poder manejar o asumir. A pesar de ser miembros de la misma familia, estos rudos pescadores siempre mantienen las distancias y sufren en soledad sus tormentos individuales. La falta de comunicación emocional entre los hermanos, que se intensifica por la falta de personajes femeninos a su alrededor y por el carácter extremo de su trabajo, crea un irresoluble rompecabezas de hastío y lazos rotos. Solo el miedo a la muerte del padre —metáfora evidente de la muerte del pescador— une a los hermanos y contiene sus egos.

El mar del Norte, capturado dramáticamente por el director de fotografía habitual de Coulier, David Williamson, será el único purgatorio para estos tres desconocidos. Solo se sienten conectados cuando el silencio evoca sus pensamientos y sentimientos más profundos, o cuando la brisa marítima llena en alguna medida el vasto abismo comunicativo que existe entre ellos. Siguiendo la línea de los audaces dramas familiares que Flandes ha dado en los últimos tiempos, Coulier evita caer en el melodrama, a pesar de los múltiples problemas personales y sociales que aborda, y firma un drama sólido y desolador que, al contrario que sus héroes, es increíblemente emotivo.

Cargo es una coproducción belga, holandesa y francesa de la productora de Coulier, De Wereldvrede —que cofundó con Gilles De Schryver y Wouter Sap— junto con Halal PicturesChevaldeuxtrois y la compañía de televisión pública belga Eén. Contó con el respaldo del Fondo Audiovisual de Flandes y Screen Flanders. La compañía francesa Wide se encarga de las ventas internacionales.

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(Traducción del inglés)

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