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PELÍCULAS Bélgica

Crítica: Don't Shoot

por 

- Stijn Coninx revive los Asesinatos de Brabante, un episodio traumático y aún sin resolver en la historia contemporánea de Bélgica

Crítica: Don't Shoot

El exitoso director flamenco Stijn Coninx arroja luz sobre los infames Asesinatos de Brabante, durante los cuales fueron asesinadas 28 personas y otras 22 resultaron heridas entre 1982 y 1985, un evento sangriento y aún sin resolver que forma parte de la historia reciente de Bélgica. Don't Shoot [+lee también:
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, adaptación de la polémica novela autobiográfica de David Van de Steen, reproduce la pregunta que atormentó a todo un pueblo: ¿Por qué los culpables no han sido encontrados?

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Durante los asesinatos en el Delhaize de Alost el 9 de noviembre de 1985, un joven David Van de Steen, de tan solo 9 años, observa cómo sus padres y su hermana son asesinados a tiros delante de sus ojos. Van de Steen, huérfano y gravemente herido a causa de los ataques, es acogido por sus abuelos Albert y Metje, que se ven en la difícil situación de ofrecerle al niño un futuro, a pesar de la terrible pérdida, el dolor y las preguntas sin respuesta...

En su último proyecto, Stijn Coninx se enfrenta al desafío de adaptar una historia real y muy sensible, filmar una película histórica y al mismo tiempo recrear un drama judicial en el que no se producen juicios. Lo que convierte este caso en algo único es el hecho de que la investigación lleva estancada más de 30 años. Las víctimas, que a día de hoy aún sufren traumas físicos y emocionales, deben enfrentarse a la ausencia de culpables. A pesar de que la lista de sospechosos creció con rapidez durante la investigación, todavía no se sabe quiénes fueron los Asesinos de Brabante.

La película se centra en la búsqueda de Albert, interpretado de forma magistral por una de las caras más reconocibles del cine flamenco, Jan Decleir, en el papel de un hombre que ha perdido a su hija y su nieta. Albert está decidido a encontrar a los culpables que han destrozado la vida de su nieto, pero a pesar de su obstinación, su perseverancia e incluso su ingenio, debe enfrentarse a una negativa constante, así como a numerosas amenazas de muerte destinadas a disuadirlo de continuar con su investigación. Ni él ni su nieto logran éxito en su búsqueda.

La película aprovecha para ilustrar, de forma clásica, el desencanto contra el que deben luchar los dos protagonistas, a medida que se revela la siniestra relación que une a la policía y los políticos con el crimen organizado. Durante toda la cinta nos mantenemos pegados a los hombros de Albert, que se van encorvando al soportar el peso de no poder cumplir la promesa que le hace a su nieto en la cama del hospital: encontrar a las personas responsables.

Don’t Shoot es una producción de Eyeworks (Blind Spot [+lee también:
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), compañía que se ha mantenido fiel al director desde Hector (1987). La cinta ha sido coproducida por Kaap Holland Film y Les Films du Fleuve, la compañía de los Hermanos Dardenne, que ya habían producido dos de los anteriores largometrajes de Stijn Coninx, Soeur Sourire [+lee también:
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. Esta última, estrenada en 2013, fue un éxito de taquilla en Bélgica. Podemos asumir que Don’t Shoot, gracias a su temática y la calidad de sus interpretaciones, atraerá a un número parecido de espectadores. Kinepolis estrena la película en Bélgica el día 10 de octubre.

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(Traducción del francés)

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