email print share on Facebook share on Twitter share on LinkedIn share on reddit pin on Pinterest

RÓTERDAM 2019 Voices

Crítica: Une jeunesse dorée

por 

- El film de Eva Ionesco se adentra en su propia historia personal para hablar sobre las penas de la adolescencia en el París bohemio de los 70

Crítica: Une jeunesse dorée
Galatéa Bellugi e Isabelle Huppert en Une jeunesse dorée

Proyectado en la sección Voices del Festival Internacional de Cine de Róterdam y en liza en la Competición Internacional del Festival de Goteborg, el segundo film de Eva IonescoUne jeunesse dorée [+lee también:
tráiler
ficha de la película
]
, es una historia iniciática adolescente ambientada en París, durante el invierno de 1979. Adaptando material semiautobiográfico de su propio libro Innocence (2017), Ionesco cuenta la historia de Rose (Galatéa Bellugi), una chica adolescente que vive con una familia de acogida. Rose está locamente enamorada de su novio Michel (Lukas Ionesco), que es artista; la primera vez que le vemos, lleva puestas unas alas de ángel. La cinta nos presenta a su protagonista como una joven romántica e idealista que sueña con pasar la vida en brazos de un hombre y haciendo arte. Su ensoñación no tarda en desmoronarse, pues el París bohemio revela pronto sus trampas ocultas. Ionesco muestra cómo Rose crece y acaba entendiendo que las espinas son tan importantes como la flor; por el camino, la joven intenta labrarse una carrera artística y se desarrolla como mujer. 

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

El bien recibido debut de Ionesco, My Little Princess [+lee también:
tráiler
entrevista: Anamaria Vartolomei
ficha de la película
]
(2011), se servía de una ambientación de cuento de hadas para contar la historia semiautobiográfica de una chica llamada Violetta cuya madre, interpretada por Isabelle Huppert, comienza a fotografiarla desnuda cuando solo tiene cinco años. En muchos aspectos —sobre todo, teniendo en cuenta que este nuevo trabajo también es semiautobiográfico—, Une jeunesse dorée parece una secuela del primer largo de Ionesco, a pesar de que se promocione como una obra aparte. La decisión de hacer una película desligada de la anterior tiene la ventaja de que la realizadora ha podido recurrir a Huppert otra vez. No obstante, a pesar de que interpreta un nuevo personaje, Lucille, hay muchas similitudes entre ambas mujeres, y su interpretación en este film no está a la altura de la de My Little Princess. Lucille se casa con Hubert (Melvil Poupaud), y ambos alojan a Rose y Michel con la intención de provocar una ruptura entre ellos y acostarse con los jóvenes. También enseñan a sus presas The Palace, legendario club parisino, donde estos conocen a varios personajes extravagantes. Sin embargo, el deseo de Ionesco de hacer hincapié en los personajes del club entraña una pérdida de concentración en sus protagonistas. 

Une jeunesse dorée recupera la estética de cuento de hadas del anterior film de la directora, y está marcada por un cierto barroquismo, sobre todo en el estilo teatral de las interpretaciones. Es una decisión que funciona porque la cinta contiene una crítica implícita a la cultura del libertinaje, mostrando a todos los personajes como seres hiperrealistas y llenos de artificio. Aunque es fácil comprender por qué una adolescente como Rose se enamoraría de este mundo, la directora también quiere dejar claro que la joven está tomando un camino destructivo, por lo que debe tener cuidado. El fallo de este planteamiento es que Ionesco a veces no logra yuxtaponer plenamente el carácter seductor de la escena bohemia con la destrucción que causa. Muchos cineastas han caído en la falta de tratar de mostrar qué es el aburrimiento siendo aburridos, y de la misma forma, Une jeunesse dorée es por momentos un poco banal en su intento de mostrar la banalidad. 

La película está producida por Marie-Jeanne Pascal y Mélita Toscan Du Plantier para Macassar Productions y coproducida por NJJ Entertainment, Scope Pictures y Diligence Films, con la participación de Canal+ y Ciné+. La producción también contó con el apoyo del CNC y la región Isla de Francia. La agencia belga Be for Films se encarga de las ventas internacionales.

(El artículo continúa más abajo - Inf. publicitaria)

(Traducción del inglés)

¿Te ha gustado este artículo? Suscríbete a nuestra newsletter y recibe más artículos como este directamente en tu email.

Privacy Policy