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VENECIA 2019 Orizzonti

Crítica: Mes jours de gloire

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- VENECIA 2019: El debut cinematográfico de Antoine de Bary es una historia episódica fascinante pero discreta, que satiriza la inmadurez de Vincent Lacoste

Crítica: Mes jours de gloire
Vincent Lacoste en Mes jours de gloire

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, el debut cinematográfico del escritor y director Antoine de Bary, es una historia ligera inspirada por las comedias italianas de los años 60. Fue proyectada en la sección Orizzonti del Festival de cine de Venecia, antes de su lanzamiento en Francia en enero de 2020.

Se trata de la historia de una antigua estrella del cine infantil, que se ha convertido en un veinteañero inmaduro con dificultades para encontrar trabajos de actor. Adrian es interpretado por el encantador Vicent Lacoste, que apareció en el corto L'Enfance d'un chef de Bary, el cual gozó de una gran aceptación en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes de 2016. El tema principal de este corto, que narra la historia de un joven actor que atraviesa las dificultades de la adolescencia mientras es contratado para interpretar a Charles de Gaulle, eleva una producción discreta. El director, para bien o para mal, parece obsesionado con el hecho de que la estrella de Amanda [+lee también:
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(2019) guarda un gran parecido con de Gaulle de joven.

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El egocentrismo de Adrian queda retratado en la divertida escena de apertura de Mes jours de gloire. Una brigada de bomberos está frente al edificio de apartamentos donde el actor vive, en Paris. Y él, en lugar de estar preocupado, decide subir las escaleras para entrar en su piso por la ventana. Resulta que él mismo había llamado a los bomberos, ya que se había olvidado las llaves en casa. Mientras Adrian celebra su supuesto ingenio, el cuerpo de bomberos le multa por haberles hecho perder el tiempo. Es la primera, pero ni de lejos la última bofetada que la vida dará a Adrian a causa de su estupidez.

En comisaría, Adrian conoce a Léa (Noée Abita), una estudiante de instituto con la que parece tener cierta afinidad, por lo que decide compartir un cigarrillo con ella. La vida parece sonreírle cuando consigue un papel en una gran producción por primera vez en años, pero está claro que su suerte no tardará en volver a cambiar. La estupidez que muestra Adrian al responder preguntas como quién ganó la Segunda Guerra en la graciosa escena de su audición para este papel muestra la visión que tiene el director respecto a su protagonista. Finalmente, Adrian consigue el papel por un gran número de motivos, que nada tienen que ver con su talento como actor. La tercera trama de esta historia tiene que ver con la relación asimétrica que tiene con sus padres: Betrand, un alcohólico interpretado por Cristopher Lambert, y Nathalie, una mujer firme pero justa interpretada por Emmanuelle Devos. Ambos parecen estar hartos de su hijo, y reaccionan con una actitud exhausta al regreso de Adrian al hogar familiar después de que sea desalojado del piso donde vivía.

La película tiene muchos momentos divertidos, pero parece estar anticuada, al igual que el jazz que conforma su banda sonora. ¿Cuántas películas necesitamos sobre un hombre joven de clase media que atraviesa una crisis, después de descubrir que necesita demostrar que es la persona que cree ser con algo más que palabras? Incluso cuando el énfasis es ridiculizar este tipo de persona, sigue resultando irritante.

Estas tres tramas: romance, familia y amor, tienen sus momentos. Y sí, la película tiene encanto y humor, pero también puede ser empalagosa y agotadora en ciertos momentos. El elemento más destacable, a lo largo de toda la película, es la interpretación de Lacoste, que está demostrándose a sí mismo que es el Louis Garrel de su generación. La discusión en set entre Adrian, el director y un actor rival resulta especialmente insulsa. La forma en la que maneja la relación de Adrian con Léa resulta muy brusco, sobre todo cuando Adrian la lleva de vuelta al apartamento. En general, no obstante, hay más que suficiente para disfrutar de Mes jours de gloire, por lo que deberíamos mantenernos alerta sobre los próximos trabajos de de Bary.

Mes jours de gloire es una producción francesa de Iconoclast Films y coproducida por Tribus P Films. Bac Films posee los derechos de venta internacionales de la película.

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(Traducción del inglés por Raúl Alcantarilla)

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