12/03/2021 - Los niños no están bien en el documental de Franz Böhm, pero no dejan de intentar estarlo

Pensemos en Greta, tan famosa que podemos referirnos a ella solo con su nombre, al igual que Malala. Los jóvenes detrás de la ‘Marcha por nuestras vidas’ o Thandiwe Abdullah, co-fundadora del Black Lives Matter Youth Vanguard, y así sucesivamente. En la actualidad, nadie en su sano juicio podría sorprenderse de que los jóvenes estén cambiando el mundo. Dear Future Children [+lee también:
tráiler
ficha de la película], la cinta de Franz Böhm presentada en la competición Creative Documentary del FIFDH, sigue a otros tres activistas, cada uno con su propia lucha: ya sea el cambio climático, la necesidad de una reforma social o la independencia política. Esto hace que la película sea a la vez oportuna y algo repetitiva, ya que apenas aporta nada nuevo a la discusión.

Saltando principalmente entre Hong Kong, Uganda y Chile, Böhm deja que sus protagonistas hablen libremente, interrumpidos únicamente por las voces de los periodistas que aportan información de fondo sobre lo que está ocurriendo. Resulta comprensible, ya que de esta forma pueden controlar su propia narrativa, pero esto coloca la producción en la categoría de “obras para escuelas”, en lugar de cine. Los jóvenes explican muchas cosas, mencionando a algunos de los referentes que les precedieron, y aunque sus historias podrían inspirar a otros a poner las ideas en práctica, esto no mejora la experiencia de visionado. En cualquier caso, es informativo, así que siempre podemos aprender algo.

Lo que resulta verdaderamente sorprendente es lo ansiosos que se muestran los adultos por dar la bienvenida a esta nueva generación. "Vosotros sois los que tenéis que prestar atención", dice uno de ellos, y solo le falta hacer el gesto de Poncio Pilato lavándose las manos antes de la crucifixión. Les gusta el poder, pero no la responsabilidad. Sin embargo, estos niños parecen ser conscientes. Están cansados de sus promesas, de sus mentiras, cansados de su incapacidad para responder a una simple pregunta, que sería casi ridícula si no fuera porque hace sus vidas mucho más difíciles. Al ver esta película, resulta obvio que el cambio ya ha ocurrido. Al igual que dejamos de creer en los cuentos de hadas al hacernos mayores, también dejamos de pensar que los adultos tienen todas las respuestas. En ambos casos, simplemente no hay pruebas suficientes para demostrar lo contrario. Especialmente cuando tu propio profesor dice que el cambio climático es "el plan de Dios", así que debes aceptarlo.

No es de extrañar que estemos ante soñadores sensatos, prácticos y lúcidos, que prefieren encontrarse con zombis que con militares en sus pesadillas. Tiene sentido, ya que son más lentos. Pepper, Hilda y Rayen han visto muchas cosas, y también han tenido que sacrificar algunas, ya que mantenerte fiel a tus creencias puede salir caro hoy en día, o en cualquier otra época. Por eso, cualquier oportunidad de ver a estas chicas comportándose como “gente de su edad" es algo maravilloso, como el entusiasmo de Hilda antes de un discurso importante que, por una vez, no está tratando de ocultar o controlar.
-“¿Qué te gustaría decirle al mundo?”
-“Muchas cosas.”
Y está claro que lo hará.

Dear Future Children es una coproducción entre Alemania y Reino Unido, producida por Schubert Film UG, Nightrunner Productions, Lowkey Films y Übergrafisch. Magnetfilm GmbH se ocupa de las ventas internacionales.

(Traducción del inglés)