30/03/2007

La presencia de los estudios hollywoodienses y del innovador sistema de incentivos fiscales ayudó a los históricos estudios británicos Pinewood Shepperton a sobrepasar las expectaciones de toda la industria en 2006, con un incremento del 22% en la facturación con respecto al año anterior, acabando con 80 millones de euros en su bolsillo. Los beneficios brutos también aumentaron hasta la friolera cifra de 10,6 millones de euros, frente a los 883.000 euros del año anterior.

Aunque 2005 fue un año difícil debido a los desalentadores recortes de beneficios fiscales, el año pasado, el gasto en producción cinematográfica en Reino Unido aumentó un 48%, hasta alcanzar más de 1.200 millones de euros, el segundo récord de la historia.

Los estudios extranjeros que llegan en masa a Gran Bretaña han incrementado las inversiones extranjeras en un 83% (hasta 838 millones de euros) y han traído con ellos un importante número de éxitos internacionales, como Casino Royale [+lee también:
tráiler
ficha de la película], United 93 [+lee también:
tráiler
ficha de la película], Hijos de los hombres y The Bourne Ultimatum, por nombrar sólo algunos.

Y, mientras la industria nacional debe luchar por una competición más feroz contra países del Este como Rumanía, Hungría o la República Checa (ver noticia) y, naturalmente, contra Estados Unidos, el Director General de Pinewood, Ivan Dunleavy, se muestra optimista sobre lo que su país tiene que ofrecer, y dice: "Nosotros tenemos increíbles competencias e infraestructuras aquí en Reino Unido y contamos con una gran tradición en la producción de buenas películas".

A pesar de las recientes agitaciones en el sistema fiscal (ver noticia), los expertos predicen que 2007 puede ser el año más lucrativo de la industria cinematográfica local, en su mayor parte por la nueva oferta del Tesoro de proporcionar hasta el 20% de los incentivos fiscales para películas de bajo presupuesto y hasta el 16% para las que cuenten con más o menos 30 millones de euros.

Dunleavy añadió que los créditos fiscales del ministro Gordon Brown han contribuido a la confianza de los cineastas en Reino Unido, y afirmaba: "Nuestro negocio es a largo plazo. Existimos desde hace unos 70 años y estamos desarrollándonos para que los asuntos de las industrias creativas funcionen en un futuro".

(Traducción del inglés)