17/05/2007

Durante las dos proyecciones para la prensa celebradas en la noche de ayer, 4 months, 3 weeks and 2 days [+lee también:
crítica
tráiler
entrevista: Cristian Mungiu
entrevista: Oleg Mutu
ficha de la película], el segundo largometraje del cineasta rumano Cristian Mungiu, presentado a la competición oficial en el Festival de Cannes, fue recibida con gran entusiamo. De un realismo sobrecogedor, la película, que aborda frontalmente el tema del aborto en la Rumanía decadente de 1987, logra trazar a la perfección en una sola jornada, el retrato psicológico de dos jóvenes solidarias que deben enfrentarse a una dura prueba, dando lugar a la reflexión sobre el contexto político-económico-social de los últimos años de Ceausescu. Y la maestría de un estilo muy depurado, alternando tomas de cámara al hombro ultra-dinámicas que siguen a la protagonista (pasillos, transporte público) y de escenas pausada, muy recortadas, en espacios cerrados y reducidos (esencialmente habitaciones) que colocan desde ahora a Cristian Mungiu como una de las mayores revelaciones de este festival apenas iniciado.

Interpretado por las excelentes Anamaria Marinca y Laura Vasiliu, 4 months, 3 weeks and 2 days arranca en una residencia, en la que dos estudiantes de 22 años comparten habitación, un contexto que se presenta mediante una fascinante secuencia de inicio que le confiere una tonalidad casi documental a la película, y con un ritmo acelerado. Tras todo esto, el tiempo corre: la introvertida Gabita (Laura Vasiliu) está embarazada y debe abortar en secreto, una práctica prohibida en Rumanía de 1966 a 1989. La extrovertida Otilia (Anamaria Marinca) se hace cargo de los preparativos (el dinero, el alquiler de una habitación en un hotel, la cita con la persona que va a realizar el aborto…) en un ambiente urbano grisáceo rozando el cuarto mundo económico (tráfico, caos, edificios casi derruidos) y de sórdidas amenazas de la policía. Pero este apoyo femenino y amistoso no le traerá más que problemas, el aborto no se desarrollará en absoluto como las dos chicas lo habían previsto, el médico improvisado (Vlad Ivanov) resulta ser un verdadero torturador que se aprovecha al máximo de la situación de desesperación de Gabita. Una visión muy negra de la masculinidad ("sabéis que todo tiene un precio en este mundo"), que se puede interpretar también como una metáfora del poder, pero que el cineasta y el guionista prefieren expresar poniendo énfasis en los detalles cotidianos (incluido el aborto en sí mismo, tratado con una precisión quirúrgica). Un instructivo viaje al lado más oscuro del hombre con ritmo de thriller y beneficiado con el talento del director de fotografía Oleg Mutu que aporta a la película su atmósfera asfixiante.

Primera película de una serie bautizada como Cuentos de la Edad de Oro, sobre los años en los que Ceaucescu estaba en el poder, desde el ángulo de la vida cotidiana, 4 mois, 3 semaines et deux jours ha sido producida por Mobra Films (productora del director y de su socio Oleg Mutu). Coproducida por Saga Film, el largometraje ha recibido el apoyo del Centre National Roumain de la Cinématographie y del fondo Hubert Bals Fund, y ha contado con la participación destacable de la televisión rumana y de Arte Allemagne. Las ventas internacionales están a cargo de Wild Bunch.

(Traducción del francés)